Los negociadores del Gobierno colombiano y de las FARC llegan a Oslo buscando la paz

Todavía queda una semana para que se inicien los diálogos con los que se espera llegar a un acuerdo de paz definitiva, pero las delegaciones del Gobierno de Colombia y de la guerrilla de las FARC ya han dado los primeros pasos.

Desde Bogotá y La Habana, respectivamente, los equipos negociadores del Gobierno y de la guerrilla han puesto rumbo a Oslo para iniciar la próxima semana un esperado diálogo formal de paz.

"Se sigue el mismo plan", ha expresado una fuente cercana al equipo de negociadores del Gobierno al referirse al calendario programado. Pero la verdad es que no se sabe mucho sobre cómo se van a desarrollar estas conversaciones.

El hermetismo ha sido la constante en Colombia sobre los detalles y la logística que rodearán la presentación para la comunidad internacional del inicio de las negociaciones de paz.

Por el momento, los funcionarios de Oslo guardan silencio sobre el sitio donde el próximo miércoles delegados del Gobierno del presidente Juan Manuel Santos y también, de la guerrilla de las FARC, expresarán públicamente la instalación de la mesa de diálogos en Oslo.

Aunque en esta ciudad, sede de la entrega del Nobel de la Paz, el tema humanitario es prioridad a la hora de los debates, en esta ocasión lo que prima es la sobriedad.

Lo que si está previsto es que este lunes se encuentren en la capital noruega ambas delegaciones para cerrar los asuntos pendientes. Desde La Habana, 'Marco León Calarcá', uno de los integrantes del equipo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), confirmó este plan. Aunque también ha advertido que el jefe negociador de la guerrilla, conocido bajo el alias 'Iván Márquez', aún no había llegado a Cuba, desde donde debe trasladarse después a Oslo en los próximos días.

En declaraciones a la emisora colombiana 'La FM', Calarcá, cuyo verdadero nombre es Luis Alberto Albán Burbano, admitió, sin ahondar en más detalles, que han surgido "algunos pequeños inconvenientes" en los desplazamientos de los rebeldes que no influirán en los diálogos de paz. "Un traspié no significa el final", ha insistido.

El diálogo formal que abrirán el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las FARC sigue a seis meses de conversaciones secretas en La Habana, celebradas entre febrero y agosto pasado, cuando las partes anunciaron que habían llegado a un acuerdo.