La llamada de socorro de François Hollande para formar una alianza internacional fuerte y única que acabe con el Dáesh y su ejército ha sido escuchada. El presidente Putin, se entrevistará con él, de momento ya ha dado orden a su armada para que coopere con la francesa en los bombardeos en Siria. Según ha informado el Kremlin, Putin y Hollande tratarán en persona la cooperación contra el terrorismo yihadista el próximo 26 de noviembre en Moscú, después de que el líder francés se reúna con Obama. «Hay que entablar contacto directo con los franceses y trabajar con ellos como aliados (...). Debemos elaborar un plan de acciones conjuntas tanto en el mar como en el aire», afirma Putin, quien subraya que «en breve» al Mediterráneo Oriental llegará una flotilla de buques militares franceses encabezados por el portaaviones Charles de Gaulle. Aviones franceses bombardean posiciones del Estado Islámico en la ciudad siria de Al Raqa por tercera noche consecutiva, según ha informado el ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian. Según confirma en una entrevista concedida a la cadena ‘TF1’, se han movilizado diez cazas del Ejército galo, que mantienen su objetivo en esa región, considerada el feudo de los yihadistas en ese país Y el presidente Obama, a través de su secretario de Estado de visita en París, ofrecía aumentar su colaboración: “Tenemos que aumentar nuestros esfuerzos para impedir la planificación de atentados y golpearles en el corazón. Vamos a intercambiar más información”, Kerry asegura que la presión surte efecto porque Daesh pierde terreno y la coalición lo gana. Éxito diplomático en Washington y Moscú. Más contenida la acogida de sus socios europeos a la petición de “ayuda mutua” por agresión exterior. Según medios franceses, París ha solicitado a sus socios europeos todo tipo de ayuda para la maquinaria de guerra: sobre todo aviones cisterna, de transporte, y médicos y enfermeros y material sanitario. Menos éxito ha tenido el gobierno socialista en el parlamento. Cuatro días después de los atentados, la derecha en pleno ha abucheado al primer ministro Manuel Valls por lo que consideran una ineficiente política de seguridad interior. La unidad ante el terrorismo apenas duró 72 horas