El Supremo avala que no se rescatara la autopista R-2: "Hubo una valoración excesiva de tráfico y de ingresos"
La crisis económica no es un "riesgo imprevisible" para el Alto Tribunal
Madrid
El Tribunal Supremo ha avalado que el Ministerio de Fomento no accediera en 2011 a rescatar la autopista de peaje radial R-2 Madrid-Guadalajara, actualmente en concurso de acreedores, al considerar que la concesionaria de la vía realizó una "excesiva" estimación de tráfico en el momento en que se adjudicó su costrucción.
La caída del tráfico, junto con el sobrecoste de las expropiaciones, son los principales factores que esta y otras siete autopistas señalan como principal causa de su actual situación de quiebra.
"El plan económico-financiero elaborado por la concesionaria de la R-2 y que determinó la adjudicación de la concesión de la autopista presentó una valoración excesiva de las estimaciones de tráfico, muy superiores a todas las registradas en el estudio elaborado por el Ministerio de Fomento", indica la sentencia del Alto Tribunal.
En su auto, el Supremo se pronuncia sobre el recurso que Henarsa, firma concesionaria de la vía, presentó en julio de 2012 al no recibir respuesta del Ministerio de Fomento a la solicitud de medidas para reequilibrar la autopista que le había presentado en octubre de 2011, dos años antes de que en septiembre de 2013 la vía se declarara en concurso.
Henarsa, la firma concesionaria de la R-2, está participada por el grupo de concesioens Abertis, la constructora ACS y Bankia.
En el auto emitido ahora por el Supremo, cuatro años después de presentarse el recurso y tres tras la declaración de concurso de esta autopista, avala la decisión de Fomento de no rescatarla en 2011.
El Supremo centra su rechazo en las "excesivas" previsiones de tráfico que la concesionaria realizó para lograr la autopista. También indica que los ingresos que la concesionaria preveía lograr con el peaje de la vía durante los 24 años de plazo de concesión se calcularon a partir de "un escenario socioeconómico optimista".
La crisis no es un "riesgo imprevisible"
Además, apelando a otras sentencias anteriores, el Alto Tribunal rechaza que se pueda considerar un "riesgo imprevisible" el hecho de que el tráfico de las autopistas haya caído como consecuencia de la crisis económica.
El Supremo también rechaza el hecho de que finalmente no se construyera una autopista entre Madrid y Tudela, que daría continuidad a la R-2, haya afectado al tráfico de ésta, al considerar probado que esta infraestructura "no era un proyecto consolidado y de efectiva y próxima realización" cuando se concretó el de la radial.
Por todo ello, además de respaldar la decisión de Fomento de no adoptar medidas para reequilibrar la autopista en 2011, impone a la concesionaria el pago de las costas del juicio, por importe de 6.000 euros.
Otras vías en quiebra
Además de la R-2, el resto de autopistas actualmente quebradas son las otras tres radiales de Madrid (R-3, R-4 y R-5), la que une la capital con el aeropuerto de Barajas, la Ocaña-La Roda, la Madrid-Toledo y la Cartagena-Vera.
Tras no fraguarse un acuerdo sobre el plan de rescate que propuso el actual Gobierno en funciones, que pasaba por nacionalizar las vías tras aplicar una quita del 50% en la deuda de 3.200 millones que suman, alguna de las autopistas han entrado ya en fase de liquidación.
En el caso de la R-3 y la R-5, el auto de liquidación insta a la concesionaria a dejar de prestar servicio el próximo 1 de octubre, con lo que las vías dejarán de estar operativas en esa fecha en caso de que Fomento no las asuma.