Bárcenas dice que Acebes autorizó comprar acciones de 'Libertad Digital' con la caja b
El extesorero del PP lamenta que una “posición puntual” en sus cuentas suizas en 2007 le haya estigmatizado como el hombre de los 48 millones de euros y sostiene que desde una posición de 18 millones, ganó 30 por su pericia en la Bolsa
Madrid
El extesorero del Partido Popular, Luis Bárcenas, a preguntas de su abogado defensor, ha lamentado durante la tarde de este miércoles que “el año 2007 es el que me ha estigmatizado como el hombre de los 48 millones de euros”, en referencia a la cantidad que llegó a acumular durante esa anualidad en sus dos cuentas suizas.
Un “estigma” multimillonario que “solo obedece a una posición puntual” durante aquel año, porque se trató de un pico en sus cuentas y la media solía ser inferior a los 40 millones. En cualquier caso, Bárcenas ha reiterado que nunca ingresó todo ese dinero, sino que partiendo de una posición de 10 millones en el año 2000, ingresó en efectivo ocho millones más durante el periodo investigado, por lo que los otros treinta millones, fueron ganados con su cartera de inversiones bursátiles, según el extesorero.
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También a preguntas de su defensa, Bárcenas ha vuelto a involucrar al Partido Popular, al sostener que “por decisión política del partido”, el entonces “secretario general”, Ángel Acebes, “autorizó la utilización de fondos de la contabilidad extraoficial para la compra de acciones de Libertad Digital”.
Es decir, según Bárcenas, fue el Partido Popular quien adoptó la “decisión política” en 2004 de concurrir a la ampliación de capital de Libertad Digital para ayudar a este medio de comunicación, y el secretario general, Ángel Acebes, autorizó al entonces tesorero, Álvaro Lapuerta, a la disposición de fondos desde la caja b del PP, para que comprasen acciones con dinero negro.
Se da la circunstancia de que coincidiendo con aquella ampliación de capital, Libertad Digital inició una dura campaña para desprestigiar la teoría yihadista sobre el atentado del 11-M de Madrid, y atribuir la masacre a la banda terrorista ETA, en unos postulados muy similares a los de la facción más dura del Partido Popular en la época.
