Los Veintisiete admiten por primera vez los profundos riesgos internos del 'brexit'

Bruselas

Con las miradas puestas en Francia, los Veintisiete inician el camino que, por primera vez, implica reducir el número de socios. Un proceso que no han podido evitar y ante el que solo queda ponerse a trabajar para evitar los daños.

A este riesgo se ha referido el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante la rueda de prensa posterior al Consejo Europeo de Bruselas. "Yo, desde luego, creo que la del brexit es una mala decisión, lo creo sinceramente", ha dicho Rajoy. "Es una mala decisión en primer lugar para el pueblo británico y es una mala decisión para Europa porque no traerá buenas consecuencias. Se trata de hacer un esfuerzo para minimizar las malas consecuencias que traerá".

Las primeras pasan por la negociación del presupuesto, un tema que siempre ha enfrentado a los países miembros y ahora se complicará más.

"Será una negociación difícil", ha dicho el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker. "Será incluso difícil mantener la unidad que hemos logrado hoy, aunque lo haremos todo por mantenerla".

Juncker ha anunciado que el Reino Unido "bloquea en estos momentos la revisión de los presupuestos" y ha reclamado que dejen de hacerlo. Un ejemplo directo del problema concreto. El del dinero. No solo el que el gobierno británico rechaza pagar como coste de su salida y que Bruselas cifra en 60.000 millones. Si no el que los otros tendrán que financiar cuando él se vaya.

"Habrá gobiernos que no querrán pagar y otros que seguirán reclamando lo mismo que hoy reciben".

Un resumen perfecto del impacto concreto para la UE de esta salida aunque en estos momentos el primer objetivo es cerrar filas y evitar con un mensaje duro que los franceses crean que pueden votar a Marine Le Pen sin sufrir consecuencias.

"El brexit que es el tema del día nos permite ver lo que pasa cuando uno se marcha de ela UE", ha dicho François Hollande antes de describir lo que pueden perder los franceses empezando por las subvenciones de la Política Agraria Común y el dinero de los Fondos Estructurales para continuar con la libre circulación de personas y mercancías como previa a los problemas que puede conllevar salir del euro. Una opción que Le Pen parece descartar en un primer movimiento de marcha atrás a todos sus discursos iniciales aunque Hollande mantiene que se limita a engañar a sus presuntos votantes. “Lo ha dicho porque sabe que sus propuestas dan miedo. Sabe que los franceses no quieren dejar de ser europeos , pero todo lo que ella propone lleva de facto y sin negociaciones a la salida por dejación”.

Un discurso a favor de Macron desde el convencimiento que el candidato al que esperan en las Instituciones de la UE "sabrá ha dicho ser un buen socio para Alemania y asumir su parte de motor de la Unión sin renunciar a defender los intereses de Francia".

"Deseo que los franceses sigan siendo franceses", ha dicho Jean-Claude Juncker asegurando que todos sus presidentes habían trabajado por construir la UE. Una Unión que ha mejorado algo su difícil nivel de convivencia interna, según el presidente Tusk que ante la prensa ha asegurado que “tras el Brexit la atmosfera es mejor de lo que era”.

Aunque los 27 tienen pendiente el reto de mantener la unidad con la que hoy se han vuelto a presentar en sociedad sin en la práctica profundizar en ninguno de los temas pendientes de la negociación ya que mantienen que nada no puede comenzar hasta que el Reino Unido esté dispuesto a asumir un coste financiero y les dé garantías sobre el futuro de todos los residentes. Un tema clave, para los españoles pero especialmente para los países del este a los que el resto garantiza su solidaridad con este acuerdo que ahora la Comisión deberá convertir en mandato jurídico a la espera “de una respuesta seria del Reino Unido”, respuesta que deberá esperar a las elecciones de Theresa May que de momento se sigue comportando como una nueva “dama de hierro”.