Donald Trump dice que el director del FBI le aseguró en tres ocasiones que no estaba siendo investigado
El director interino del FBI contradice la versión de la Casa Blanca sobre Comey
Washington
Donald Trump se lo preguntó directamente en tres ocasiones y el ya exdirector del FBI se lo confirmó: el presidente no está siendo investigado por la agencia. Trump pretende despejar las dudas a los que sospechan que el sorprendente despido está relacionado con una presunta revelación que conecta a Donald Trump con la injerencia de Rusia en las elecciones.
La Casa Blanca ha justificado el despido con dos argumentos. El primero, que Comey cometió errores en la investigación de los emails privados de Hillary Clinton. Una razón que pierde peso porque si esas faltas hubieran sido insalvables, le hubiera despedido nada más asumir la presidencia. El segundo, porque Comey “había perdido el apoyo dentro del FBI”. Esta aseveración la ha desmontado el número dos de la agencia y actual director interino, Andrew McCabe. En una comparecencia ante el Comité de Inteligencia del Senado ha dicho rotundamente que Comey “tenía y tiene el apoyo y la confianza del personal del FBI”. McCabe ha dicho también que no le consta que haya habido presiones de la Casa Blanca para entorpecer la investigación sobre la interferencia de Moscú durante la campaña y que las pesquisas van a continuar.
Comey estaba en el punto de mira de Trump desde el principio, cuando dijo que no había evidencias de que la administración Obama hubiera pinchado los teléfonos del magnate. Más de treinta oficiales de la Casa Blanca, el Departamento de Justicia y el Capitolio, según el Washington Post, aseguran que al presidente le irritaba que el director del FBI estuviera volcado en la trama rusa y no investigara las filtraciones de información a los periodistas que para Trump son “los enemigos del pueblo”, los “fake media” (medios falsos). Paradójicamente, Comey favoreció a Trump durante la campaña electoral cuando decidió abrir, once días antes de las elecciones, la investigación sobre los correos privados de Clinton.
El Senado quiere avanzar por su parte en la investigación y ha citado al general Michael Flynn, el asesor de seguridad destituido por mentir sobre sus conversaciones con el embajador de Rusia en Washington. El Comité de Inteligencia le ha pedido que presente toda la información que le vincula al Kremlin, los cobros recibidos y los encuentros con miembros del gobierno ruso. Flynn ya se negó a colaborar si no le garantizan inmunidad. También comparecerá ante este comité James Comey, lo hará el próximo martes a puerta cerrada. El exdirector del FBI, que todavía no ha hablado públicamente, había solicitado más medios personales y económicos para ampliar la investigación días antes de ser despedido.