Ana Pastor, presidenta del Congreso de los Diputados, es la excepción a una regla que se cumple desde el principio de la democracia, la de la mínima presencia de mujeres en la dirección de las altas instituciones del Estado
La infrarrepresentación femenina va más allá de la cúspide. En ninguna de esas instituciones la presencia femenina supera el 43% y hay alguna que no llega al 20%
El hito más importante para la igualdad de género la representación institucional española se produjo con el primer gobierno de Zapatero, paritario y con la primera vicepresidenta de la historia