El Supremo desoye a la Fiscalía y mantiene a Forn y Sànchez en prisión: "No existen presos políticos en esta causa"
Los jueces de la sala de apelaciones han decidido confirmar la situación de prisión sin fianza para el exconseller de Interior y el candidato a President de la Generalitat después de que la Fiscalía pidiese liberar al primero con una fianza de 100.000 euros
Joaquim Forn en una imagen de archivo / ACN
Madrid
Los tres magistrados de la sala de apelaciones del Tribunal Supremo han decidido mantener en prisión provisional sin fianza tanto a Joaquim Forn como a Jordi Sànchez al entender que, en ambos casos, persiste un riesgo real de reiteración delictiva, además de no encontrar pruebas de que el exconseller de Interior padezca ninguna enfermedad.
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En cuanto a Joaquim Forn, los magistrados Alberto Jorge, Francisco Monterde y Miguel Colmenero desoyen la petición de la Fiscalía de dejarle en libertad bajo fianza de 100.000 euros, alineándose con la que hizo la acusación popular del partido ultraderechista VOX de mantenerle en prisión sin fianza. Los jueces niegan que Forn padezca ninguna enfermedad: "Mencionó una enfermedad cuya existencia no consta a esta sala y que no fue alegada ni documentada por la defensa" del exconseller.
Los jueces reconocen que Forn ha dejado su acta de diputado, pero siguen sin creer que eso haya neutralizado el riesgo de que vuelva a acceder a un puesto de responsabilidad desde el que liderar el movimiento independentista unilateral: tienen "serias dudas acerca de la sinceridad y consistencia de las manifestaciones realizadas" ante el juez, teniendo en cuenta que "mostró una especial determinación" al ordenar a los Mossos d'Esquadra, según las acusaciones, de ser permisivos con el referéndum ilegal del 1 de octubre
Representants de l'ANC i Òmnium i de partits polítics, encapçalant la pancarta en la concentració a Lleida / Salvador Miret
Representants de l'ANC i Òmnium i de partits polítics, encapçalant la pancarta en la concentració a Lleida / Salvador Miret
Joaquim Forn lleva en la cárcel de Estremera desde el 2 de noviembre, mientras que Jordi Sànchez está en Soto del Real desde el 16 de octubre, ambos en un primer momento por orden de la jueza Carmen Lamela, de la Audiencia Nacional.
Presos políticos
En su segundo auto, en el que desestiman la petición de libertad de Jordi Sànchez, los jueces niegan que la decisión del magistrado Pablo Llarena vulnerase sus derechos de presunción de inocencia así como a la libertad ideológica: "No existen presos políticos en esta causa, sino políticos que están presos por haber cometido, indiciariamente, delitos gravísimos de rebelión y sedición", dicen los jueces, añadiendo que es "un gravísimo delito contra la Constitución Española".
Los magistrados, en el auto relativo a Joaquim Forn, profundizan en esto, asegurando que "no se pretende imponer, ni se impone, un castigo por mantener un determinado pensamiento político. Es notorio que existen otras personas que defienden la independencia de Cataluña y no se encuentran privados de libertad por ello".
El contexto político
Una vez más, los magistrados esgrimen la situación política catalana y la mayoría absoluta del bloque independentista tras las últimas elecciones para mantener a los imputados en prisión: "El contexto político es mas propicio a la reiteración de los hechos delictivos por parte de quienes ya han realizado hechos similares" que si existiera "un contexto de sentido contrario", con los partidos constitucionalistas en disposición de dirigir la Generalitat.
Para los magistrados, añaden en el auto referido a la situación de Forn, "no existen inidicios claros de que se haya abandonado definitivamente la voluntad de enfrentamiento directo con el Estado con la finalidad de imponer la independencia".
La decisión de mantenerles en prisión se toma un día antes de que el juez Llarena reciba a las partes para comunicarles qué imputados son procesados en esta causa, y también después de que anunciase que este viernes revisará la libertad provisional de varios imputados.
