El expresidente del Gobierno, José María Aznar, ha comparecido este martes en el Congreso de los Diputados, en la comisión que investiga la financiación ilegal del Partido Popular. Aznar ha mantenido un tono sereno ante las preguntas de Rafael Simancas, representante del PSOE, y ha recordado que «jamás ha sido imputado ni llamado a declarar como testigo». Aunque poco a poco, el expresidente ha ido elevando el tono en una comparecencia que ha durado cuatro horas y ha dejado varios enfrentamientos entre Aznar y los distintos portavoces. Aznar ha asegurado que durante su tiempo en el Partido Popular combatió con firmeza la corrupción. “Que el PP sea un partido corrupto es un poco exagerado y es una afirmación que viene del represente de un partido condenado por corrupción con sentencia firme”, ha afirmado atacando al PSOE, que ha recordado que la sentencia de la Audiencia Nacional está recurrida ante el Supremo. “Esa sentencia es consecuencia de un proceso que ha durado 8 años y que ha tenido tres jueces, multitud de declaraciones de testigos. En ninguna fase del procedimiento ni instructores ni tribunal consideraron mi presencia ni como imputado ni como testigo”, ha recordado Aznar, que ha asegurado que no tiene que pedir perdón por nada. El expresidente ha echado balones fuera en temas que están incluso demostrados judicialmente. Aznar ha llegado a afirmar que no conocía a Francisco Correa, cabecilla de la trama Gürtel y uno de los invitados a la boda de su hija en El Escorial y ha recordado que en las mil páginas de la sentencia hay una sola prueba que le señale a él. «No existe una caja B, otra cosa es que haya personas implicadas». A lo largo de la declaración, el tono de Aznar ha ido irritando a Simancas que ha terminado por pedir al expresidente respecto. «Todo lo que estoy diciendo está acreditado, todo esto sucedió y pasó cuando usted era presidente, reconózcalo y pida disculpas», ha espetado Simancas. ¿Cobró u ordenó usted los sobresueldos, qué sabe?, ha preguntado. «No me hable de respeto señor Simancas. El PP no ha sido un partido corrupto, estoy muy orgulloso de haberlo presidido. Lo de que el PP es un partido corrupto es el discurso de Sánchez en la moción de censura, pero ustedes cambian mucho de discurso», ha respondido Aznar, que ha atacado al Gobierno de Pedro Sánchez. “Ustedes no venden bombas, venden proyectiles de alta precisión“, ha espetado. Sobre los pagos en negro, Aznar ha negado haber recibido ningún dinero. En aquellos años recibía mi retribución como diputado y como presidente y estaban declaradas, como todos mis ingresos, y no tuve más ni ordené otra orden pago que no fuese legal. Ayudé a personas perseguidas por el terrorismo y que pasaban malos momentos, pero decir que ordené pagos ilegales es ir demasiado lejos incluso para usted. Sin pruebas no puede decir estas cosas y además pedir respeto”, ha argumentado Aznar Posteriormente Aznar y Gabriel Rufián han protagonizado un encendido cruce de acusaciones por la guerra de Irak, guerra que Aznar también ha negado. Rufián también ha preguntado al expresidente si es él el J.M de los papeles de Bárcenas. “No tengo noticia ni se nada de eso papeles, yo no tengo nada que ver con esas siglas”, ha respondido. “Quien me acuse de algo que diga de qué, pero que lo sepa bien. Lo puede hacer aquí o fuera de aquí. Que piense si con eso presta un servicio al país. La presunción de inocencia no puede ser eliminada y no se puede difamar sin pruebas”, ha añadido el expresidente. Aznar ha instado a Rufián a que enumere los soldados españoles en Irak. “2.600 soldados, tres unidades, medio millón de muertos”, ha respondido el portavoz catalán, que vestía una camiseta con el rostro del cámara José Couso. “Esos hombres estaban bajo mandato de las Naciones Unidas con 50 países más en una fuerza de estabilización. Usted es miembro de un partido golpista con sus líderes en la cárcel que apoya a un gobierno que vende armas a Arabia Saudí”, ha atacado Aznar. Rufián ha respondido mostrando fotos de Aznar junto a Gadafi u Obiang. «No me hable usted de bombas señor Aznar». El interrogatorio de Rufián se ha ido encendiendo hasta terminar por irritar al expresidente. «Yo no he venido aquí a escuchar frases tabernarias ni a comentar titulares», ha espetado Aznar. «La boda de su hija fue pagada con mordidas de la Gürtel, según los jueces, a mí me la trae al pairo, lo dicen los jueces señor Aznar, no son frases tabernarias», ha respondido Rufián. «¿Qué le pasó a usted y su partido para que el jefe de la UDEF en esa misma silla calificara al PP como un parasito de las instituciones para enriquecerse?», ha atacado Rufián. «Ya le he contestado, si puede enseñarme dónde dice un juez que una parte de la boda de mi hija se pagó de manera extraña... Está usted faltando a la verdad y dígame el nombre del juez. Eso es exactamente ser un corrupto de las palabras», se revolvió Aznar. «He afrontado crisis como presidente, he hecho reformas importantes, me he enfrenado al terrorismo, he tomado decisiones difíciles y tras ocho años presento una hoja de servicio más que relevante, en ningún supuesto ha habido nadie que haya podido decir que mi comportamiento no ha sido correcto sujeto a las normas legales». Rufián ha terminado su intervención mencionando la boda de «El Padrino». «A usted solo le falta el gato. Espero verle un día ante un tribunal internacional». Aznar ha acabado sus respuestas asegurando que duerme bien por las noche y que tuvo gato. Pablo Iglesias también ha tenido un tenso enfrentamiento con Aznar. Iglesias le ha recordado a Aznar la necesidad de no mentir en la comisión y que la sentencia de la Gürtel confirmó la financiación ilegal del PP entre 1989 y 2009. Aznar ha replicado a Iglesias hablando de Venezuela e Irán y de la financiación de Podemos. “Nosotros nos financiamos conforme a las reglas”, ha reiterado Aznar. El expresidente ha echado balones fuera ante todas las preguntas del líder de Podemos volviendo a negar que conociese a Correa. Sobre si se reunió con empresarios investigados con la Gürtel, Aznar ha replicado asegurando que se ha reunido con mucha gente. El interrogatorio de Iglesias se ha ido calentado y ante las preguntas del líder de Podemos el expresidente ha pasado al ataque. «Usted me parece un peligro para las libertades de España y lo demuestra todos los días», ha señalado Aznar, que ha pedido a Iglesias que deje de hablar de los regalos de boda de su hija. «Mida mejor sus palabras e intente ser respetable». La máxima tensión ha llegado cuando Iglesias ha espetado a Aznar que es el “máximo responsable político de la corrupción del PP”. “Usted solo ha venido a decir eso. Felicidades, se ha quedado a gusto”, ha replicado Aznar, que ha acusado al líder de Podemos de mentir al decir que Zaplana está condenado por blanqueo. “Eso es mentira. Me oye. Es mentira. Le importa nada que sea mentira. Zaplana no está condenado por nada, está con leucemia en prisión preventiva. Sea usted responsable de lo que dice. Su populismo no me impresiona nada. Ha justificado a ETA, habla de volar las instituciones parlamentarias y la Transición, ha recibido millones de Irán y Venezuela y no destapa las dudas de sus pagos y tiene compañeros de partido expulsados de la Universidad. Usted tendría que ser más contenido y respetuoso. Ese tipo de lecciones no me interesa. Venía a decir eso y ha faltado la verdad. No es fiable ni respeta la verdad en absoluto”. Iglesias ha respondido tranquilo. “Hay algo triste en su intervención. Es el expresidente de mi país y la imagen patética que ha dado es una mala noticia. Trabajaré para que nadie se tenga que avergonzar de tener expresidentes como usted”. “Me da igual de lo que se avergüence”, ha respondido Aznar, que ha concluido su intervención reiterando que no tiene que pedir perdón por nada y que está muy orgulloso de ser afiliado del PP. Aznar ha utilizado durante su intervención el mismo argumentario que empleó el PP tras la sentencia de la Gürtel. Aznar no ha reconocido absolutamente nada y ha reiterado varias veces que la sentencia solamente se refiere a dos municipios de Madrid cuando la sentencia establece que el PP nacional se benefició de la financiación ilegal. También ha asegurado que la caja b no eran objeto de ese procedimiento cuando se demostró que la existencia de esa contabilidad paralela se consideró demostrada en la sentencia como el cobro de sobresueldos. Aznar ha acusado en varias ocasiones al PSOE de ser el único partido condenado por financiación ilegal y es falso. El PSOE no fue condenado porque en los tiempos del caso Filesa no se podía condenar a un partido político.