Vox quiere sumarse a las negociaciones del PP y Cs para formar gobierno en Andalucía y exige un puesto en la mesa del Parlamento
La formación ultra matiza su propuesta inicial de suprimir Canal Sur y apuesta por una reestructuración de la televisión autonómica para reducir costes
El presidente de Vox, Santiago Abascal (c), a su llegada al acto público que el partido celebra hoy en Teruel / Antonio Garcia (EFE)
Madrid
Vox quiere unirse oficialmente a las negociaciones que están manteniendo el PP y Ciudadanos para desalojar a Susana Díaz de la Junta de Andalucia, la semana que viene. De hecho, ya ha creado su comité negociador, integrado por el Secretario General del Partido, Javier Ortega Smith, uno de los miembros de la Ejecutiva Nacional, Rafael Bardají, responsable de las propuestas en materia de inmigración de Vox y Francisco José Contreras, considerado uno de los ideólogos de la formación.
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El partido de Santiago Abascal quiere focalizar esas negociaciones, al menos de momento, en el PP, ya que sienten que Ciudadanos les está ninguneando. Acusan al partido de Albert Rivera de emprender una campaña de descrédito contra ellos, por una mera cuestión estratégica.
Vox, además, ha dado un giro en sus pretensiones iniciales. Tras las elecciones andaluzas, su líder, Santiago Abascal, aseguró que no querían asumir ningún cargo en el nuevo gobierno andaluz, ni ocupar ningún puesto en el parlamento autonómico. Sin embargo, la formación ultra exige ahora estar en la mesa de la cámara andaluza. Consideran que ésta es la única forma de estar al tanto de las medidas que se van a aprobar en la nueva legislatura.
También hay exigencias programáticas. Para apoyar un posible acuerdo PP-CS, Vox exige a ambos partidos que asuman algunas de las medidas de su programa electoral. Quieren negociar, por ejemplo, la eliminación del impuesto de sucesiones, la rebaja del IRPF en su tramo autonómico y la supresión de organismos de la administración que ellos consideran superfluos y que generan un gasto innecesario. En este punto se incluye Canal Sur, aunque ahora, ya no se habla de eliminar la televisión autonómica, sino de reestructurarla y así rebajar costes.
