Los alcaldes de Madrid celebran los 100 años de la Cadena SER

El programa Hoy por Hoy Madrid, dirigido por Marta González Novo, se ha sumado a la celebración del centenario de la Cadena SER con un programa especial en el que ha reunido a cinco de los seis alcaldes electos que ha tenido la capital desde la transición. Por los micrófonos de la SER han pasado Juan Barranco (1986-1989), el alcalde que sustituyó al primer regidor de la democracia, Enrique Tierno Galván (1979-1986) y que dejó el poder a mitad de una legislatura por una moción de censura con la que asumió la alcaldía Agustín Rodríguez Sahagún (1989-1991); José María Álvarez del Manzano (1991-2003), el regidor que más años ha ostentado el bastón de mando; Alberto Ruiz-Gallardón (2003-2011), que salió de la alcaldía al inicio de su tercer mandato, dejando en el puesto a Ana Botella (2011-2015); Manuela Carmena (2015-2019), que recuperó la alcaldía de Madrid para la izquierda 26 años después; y José Luis Martínez-Almeida (desde 2019), el actual alcalde, que ya va por su segunda legislatura. En este encuentro, histórico para la radio, se han reunido en el estudio central de la Cadena SER cuatro de estos cinco alcaldes, todos excepto el actual, José Luis Martínez-Almeida que, por motivos de agenda, ha participado unos minutos al final del programa, desde su despacho en el Ayuntamiento. Todos se han planteado la cuestión de si alguna vez se deja de ser acalde, una vez que se ha ostentado ese cargo. Manuela Carmena ha asegurado que ahora se siente una ciudadana más, mientras que Juan Barranco ha recordado que, a pesar de haber sido diputado nacional y autonómico, y también senador, cuando la gente le saluda y lo para por la calle, lo hace por haber sido alcalde de Madrid, y ha reconocido que es el cargo que más huella le ha dejado. José María Álvarez del Manzano ha dicho que sí se sigue sintiendo alcalde, y que los 12 años que pasó en el cargo han marcado su vida. También ha recordado una anécdota en común con Alberto Ruiz-Gallardón, al que le dijo, cuando dejó la alcaldía para ser ministro de Justicia en 2011, «lo siento, Alberto. Desciendes de alcalde a ministro». Ruiz-Gallardón, por su parte, ha señalado que la alcaldía no es un puesto político más, y que a pesar de haber pasado por todas las administraciones, no hay nada que le haya dejado más huella, que le haya hecho estar más cerca de los ciudadanos, que siendo alcalde de su ciudad. Con la jefa del departamento de Documentación de la Cadena SER, Ana Martínez Concejo, los alcaldes han ido recordando los momentos más señalados de cada legislatura, empezando por el primer alcalde electo de la democracia, Enrique Tierno Galván, y sus bandos, pensados y redactados a conciencia con un lenguaje culto y fluido. Juan Barranco ha dicho que esos bandos «son una joya de la literatura mundial. Los trabajaba muchísimo, palabra por palabra, y se han hecho varias reediciones, porque los madrileños siguen demandándolo». Durante el mandato de Tierno Galván, el 18 de diciembre de 1983 Madrid amanecía con el incendio de la discoteca Alcalá 20, en el que murieron 81 personas. José María Álvarez del Manzano estaba entonces en la oposición, y ha recordado que acudió al lugar y lo pasó mal. Manuela Carmena era magistrada del Juzgado de Primera Instancia de Madrid, y ha rememorado ese momento con mucho dolor, porque conocía a una de las víctimas. Alberto Ruiz-Gallardón lo sigue observando con asombro. Esa tragedia le hizo comprender la enorme responsabilidad que tiene un alcalde, y que no tiene nada que ver con la imagen placentera que mucha gente interpreta que se produce cuando se asume estar al frente de un Ayuntamiento o de una de sus áreas. Juan Barranco ha alabado el comportamiento que tuvo entonces el jefe de la oposición, que era Álvarez del Manzano, con un gran sentido institucional y de la responsabilidad. Álvarez del Manzano le ha replicado que una cosa es ser la oposición, y otra no ver la realidad, imputando al Gobierno responsabilidades que no tiene. En eso, ha añadido Álvarez del Manzano, en la política se ha bajado «un poco» el listón, añadiendo que ahora hay menos respeto personal que antes. Gallardón ha concluido: «discrepo, aunque solo sea un poco». La era de Juan Barranco como alcalde se inicia el 21 de enero de 1986, con la muerte de Enrique Tierno Galván, cuyo funeral supuso una de las mayores demostraciones públicas de afecto de los ciudadanos a un mandatario que se recuerdan. El propio Barranco se ha emocionado al recordarlo, y ha dicho que fue una manifestación de duelo de todos los madrileños, de todas las ideologías, de todas las creencias, y que probablemente será irrepetible. José María Álvarez del Manzano ha admitido que fue un momento difícil, y que a él le hizo descubrir que el viejo profesor, al que él se había opuesto por obligación, era respetado. Alberto Ruiz-Gallardón ha recordado que Manuel Fraga asistió al funeral, porque tenían muy buena relación y se respetaban mutuamente. Manuela Carmena ha destacado que Tierno Galván llegó a conectar con la juventud, lo que evidencia, ha añadido, que nunca se puede gobernar bien si no es contando con la juventud. Juan Barranco llegó a enfrentarse a su propio partido, el PSOE, por su pacifismo y por ser contrario a las bases militares estadounidenses en España y a la permanencia de nuestro país en la OTAN, en cuyo referéndum el Partido Socialista había modificado su postura previa («OTAN, de entrada no»), pidiendo el «sí» en aquella consulta, en marzo de 1986. Barranco llegó a participar en manifestaciones contra las bases norteamericanas en España, incluso presentó alguna interpelación parlamentaria para cerrar la base aérea de Torrejón. «Mantuve esa coherencia. No me llamaron a capítulo, pero sé que no les gustó», ha señalado Juan Barranco. Otro de los hitos en el mandato de Juan Barranco fue la construcción de vivienda social, especialmente en barrios más desfavorecidos. El asunto de la vivienda no ha perdido actualidad, aunque la solución, ha señalado Barranco, no es fácil. Pero en aquella época, ha recordado, Madrid estaba llena de chabolas e infraviviendas. «Se hizo en aquel momento y ahora, que es un momento complicado, la única forma de abordar este problema tan complejo es, ha añadido Barranco, con el compromiso de todas las administraciones». Juan Barranco terminó el mandato inacabado de Enrique Tierno Galván, y ganó las elecciones de 1987. Pero a mitad de su legislatura Alianza Popular y el Centro Democrático y Social (CDS) presentaron y ganaron una moción de censura contra él que dio el gobierno municipal a Agustín Rodríguez Sahagún (CDS). Su nieto, que se llama igual que él, trabaja actualmente como periodista en Radio Madrid, y ha contado en directo anécdotas como cuando le llegaron a colgar el teléfono en el Ayuntamiento porque pensaron que estaba gastando una broma a los funcionarios cuando se identificaba por su nombre y apellidos cada vez que llamaba para pedir una información oficial del consistorio madrileño. Agustín Rodríguez Sahagún no volvió a presentarse a las elecciones y se retiró de la vida pública para someterse a una intervención cardiovascular de la que no se recuperó, falleciendo en octubre de 1991, apenas cinco meses después de las elecciones municipales de mayo de 1991, en las que ganó José María Álvarez del Manzano, el alcalde que más tiempo ha estado en el puesto en la actual etapa democrática: 12 años, o tres legislaturas completas. Álvarez del Manzano creó el SAMUR, y ha reconocido que es de las cosas de las que más orgulloso se siente, porque es una institución que salva vidas. «Fue la primera vez que conseguimos que un cirujano se metiera en un quirófano móvil, y que eso hiciera posible que se salvara mucha gente». También implantó los parquímetros. «No me tembló el pulso porque, antes de instalar los parquímetros, construí cien mil plazas de aparcamiento». Con José María Álvarez del Manzano como alcalde Madrid intentó, por primera vez, convertirse en sede de unos Juegos Olímpicos. Luego lo volvería a hacer en otras dos ocasiones. Él ha dejado claro que presentó la candidatura porque el entonces presidente del COI, Juan Antonio Samaranch, le dijo que Madrid tenía posibilidades. Álvarez del Manzano ha señalado que Madrid tendría que haber sido ya sede olímpica, y ha vaticinado que seguramente lo será. Alberto Ruiz-Gallardón, que también lo intentó, ha dicho que hay esfuerzos que, aunque no se consiga el resultado, solo con intentarlo se consigue un beneficio, y que estar en la candidatura fue bueno para la ciudad. No obstante, Gallardón también ha dejado claro que «la forma de adjudicación de los Juegos Olímpicos es algo tan absolutamente ajeno a criterios de objetividad y tan discrecional por parte de un club privado, que yo pensaría mucho si una ciudad como Madrid, importante y consolidada en el siglo XXI, debe volver a intentarlo». En las elecciones de 2003, Alberto Ruiz-Gallardón consigue de nuevo la victoria para el Partido Popular, y se inicia una era muy marcada por las grandes obras que llevaron al soterramiento de la M-30 y a la profunda transformación de Madrid Río, la peatonalización de Callao, Montera y Fuencarral, el túnel de Santa María de la Cabeza o el traslado de la sede municipal de la Plaza de la Villa a Cibeles. Tantas obras, y tan criticadas, le llevaron a pedir disculpas a los ciudadanos. Gallardón ha recordado una anécdota en relación con todas estas obras, y muy especialmente con las del soterramiento de la M-30. El ex alcalde madrileño ha mencionado que recientemente, al coger un taxi, «el conductor me dijo: hombre, Gallardón. Cuando me llama Gallardón me dije uy, esto me suena un poco raro. Y continúa: si usted supiese lo que yo, en este taxi, he dicho de usted y de su familia mientras duraban las obras de la M-30, usted no se habría subido. Ahora que han terminado, dígame a dónde va, que le llevo gratis. Y no me cobró». El momento más duro de su mandato fueron los atentados del 11 de marzo de 2004. Alberto Ruiz-Gallardón ha reconocido que no solo fue el peor momento de su vida política, sino el por momento de toda su vida. También ha dicho que la parte positiva que se extrajo de aquella tragedia fue la respuesta de los servicios públicos y el comportamiento de los ciudadanos, «que supieron no caer en la trampa que les tendía el terrorismo islamista, que buscaba romper la convivencia generando islamofobia». José María Álvarez del Manzano, en aquel momento presidente de IFEMA, también ha recordado esa solidaridad de toda la población, que se volcó en ayudar a las víctimas y a sus familiares. Manuela Carmena ha mencionado lo pronto que se inició el debate sobre la autoría de los atentados, y Gallardón ha dicho que el juez Baltasar Garzón, en aquel momento en la Audiencia Nacional, habló con él a primera hora, sobre las diez de la mañana del 11-M, y le dijo que no había sido ETA, no porque tuviera evidencias, sino porque la banda terrorista no tenía capacidad logística para haber hecho aquello, ni tampoco era su modus operandi. Alberto Ruiz-Gallardón gana las elecciones municipales de 2011, pero pocos meses después se marcha del Ayuntamiento para ser ministro de Justicia en el Gobierno de Mariano Rajoy, tras los comicios generales del 20 de noviembre de ese año. Se elige como sustituta a Ana Botella, esposa del expresidente José María Aznar, que ocupaba el número 2 en la lista electoral del PP al Ayuntamiento de Madrid. Fue la primera mujer en ocupar el puesto de alcaldesa de Madrid, y la sucedió otra mujer, Manuela Carmena, la primera mujer que gana unas elecciones municipales en Madrid, en 2015, devolviendo a la izquierda, 26 años después, el gobierno de la capital. Si hay algo por lo que se recuerda a Manuela Carmena es por su afán en conseguir que Madrid fuese una ciudad más limpia y menos contaminada. La creación de Madrid Central, como zona de bajas emisiones, le acarreó duras críticas del Partido Popular, entonces en la oposición, que más tarde, ya con José Luis Martínez-Almeida en el Gobierno, asumiría Madrid Central, convirtiéndolo en Madrid 360. «Tenemos que obviar mantener una postura diferente si estás en la oposición o si estás en el Ejecutivo. Tenemos que buscar de verdad lo que nos une porque, si no, la imagen que damos a la ciudadanía es penosa», ha señalado Carmena. Manuela Carmena, que se autodefine como «metrera», acudió a su primer día de trabajo como alcaldesa en Metro. Con ella ondeó por primera vez la bandera LGTBI en el Ayuntamiento y, sobre la fachada del Palacio de Cibeles, se desplegó una gran pancarta en la que se podía leer, en inglés, «Bienvenidos, refugiados». Otra de sus apuestas fue abrir el consistorio a la participación ciudadana, incluyendo un Pleno especial en el que se debatieron propuestas de los ciudadanos. El actual alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, no pudo participar, por motivos de agenda, en este encuentro histórico de primeros ediles madrileños desde la transición. Pero en una entrevista aparte, también en el programa especial de Hoy por Hoy Madrid, Almeida ha valorado incluso como algo positivo no haber estado presente junto a sus predecesores, «que seguramente tenían mucho que decir, y mucho que aportar, al margen de la actualidad». Martínez-Almeida ha reconocido que echa de menos la radio, porque fue tertuliano político en el programa durante su etapa en la oposición a Manuela Carmena. «A mí me encanta debatir. Poder confrontar opiniones y distintos puntos de vista siempre es bueno, y yo creo que en este programa lo hacíamos. y, además, desde el respeto». El alcalde de Madrid ha valorado el trabajo de la Cadena SER. «Yo creo que hay que agradeceros lo que hacéis. Los que estamos en responsabilidades en Madrid somos muy conscientes del trabajo que hacéis día a día». José Luis Martínez-Almeida ha destacado la evolución de la ciudad de Madrid, y cómo todos los alcaldes y alcaldesas que ha tenido la capital, desde distintas concepciones políticas, han arrimado el hombro para que la ciudad siguiera progresando. Almeida ha recordado los hitos más complicados que le tocaron estando en la oposición: las dimisiones de Esperanza Aguirre y de Cristina Cifuentes, la moción de censura del PSOE contra Mariano Rajoy y, al final de la legislatura, el debate y el «casting» para decidir quién debía ser el candidato del Partido Popular en las municipales de 2019. Sobre el ambiente crispado que atraviesa ahora la vida política, Martínez-Almeida ha dicho que «cuando los madrileños estuvieron más orgullosos de nosotros, cuando más se identificaron con los políticos de Madrid, fue con los Acuerdos de la Villa. Costó, pero es una reflexión que todos los que estamos en el Ayuntamiento deberíamos tener en la cabeza. Begoña [Villacís] lo dijo en su despedida: esta es una profesión en la que te hablas peor en público que en privado. Deberíamos ser capaces de debatir de manera más civilizada y cortés. Es cierto que es tiempo de redes sociales, que presionan mucho y generan popularidad, pero a veces deberíamos tener la capacidad de abstraernos de los extremos y de generar un mejor debate». José Luis Martínez-Almeida ha señalado que le gustaría que le recordasen como «el que hizo lo que tenía que hacer en cada momento, sin atender exclusivamente a su interés político. Si me preguntas sobre este momento de ahora, yo creo que de lo que más orgulloso me siento es de que durante la pandemia no solo yo, sino el Ayuntamiento, estuvo más cerca que nunca de los ciudadanos». En este programa especial con los alcaldes y alcaldesas de la actual democracia en el Ayuntamiento de Madrid también ha habido un recuerdo para algunas de las anécdotas, que quedaron registradas en la fonoteca y que, en su momento, sacaron una sonrisa durante sus respectivos mandatos. Desde la canción «Manuela» con la melodía de «Noelia» de Nino Bravo, dedicada a Carmena en la campaña electoral de 2019 por el grupo Niña Vintage; hasta el tradicional villancico que José María Álvarez del Manzano cantaba todos los años con Olga Ramos en la Plaza Mayor para inaugurar el mercadillo navideño, y que se ha atrevido a cantar de nuevo en este programa del centenario de la radio. Anécdotas como el «rockeros, el que no esté colocado que se coloque, y al loro», de Enrique Tierno Galván; el mensaje navideño de Gallardón, en Radio Taxi, que se cortó durante la emisión; el «relaxing cup of café con leche in Plaza Mayor», de Ana Botella; o el balonazo de Almeida a un niño durante la inauguración de un campo de fútbol, en Sanchinarro. Al final, todos los alcaldes han felicitado a la Cadena SER por su centenario, y José María Álvarez del Manzano ha bromeado con la concordia demostrada por todos los invitados: «seguro que haces una reunión de 4 políticos y no discurre con la tranquilidad de esta. Los alcaldes somos otra cosa», ha concluido Álvarez del Manzano.

Los alcaldes de Madrid celebran los 100 años de la Cadena SER

Carlos Cala

Webs de PRISA