Vitoria renuncia a la cláusula de trabajos comunitarios en los pisos de alquiler para jóvenes

Vitoria

La polémica ha durado dos días. Y no es una frase hecha. Este lunes la CADENA SER avanzó que el Ayuntamiento exigía como requisito a los jóvenes que optan a un piso municipal de alquiler que realizaran trabajos comunitarios. Y 24 horas después el alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran, ha avanzado que renunciará a ella tras el rechazo suscitado entre los grupos de la oposición. 

"Si esto ahora va a suponer pegas y va a dificultar la puesta en marcha del plan de vivienda que ya anuncié en el debate del estado de la ciudad, evidentemente la retiraremos", ha explicado el alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran, durante una comparecencia ante los medios de comunicación. Y eso, de facto, supone que el Gobierno municipal retirará esa cláusula de su plan de vivienda.

El alcalde, que gobierna en minoría, no tiene los votos suficientes para sacarla adelante. EH Bildu, Podemos e Irabazi han pedido que se retire la obligación de los trabajos comunitarios y el PP pone en cuestión el plan de viviendas en alquiler en su conjunto. Para el alcalde lo más importante es salvar ese plan para que "a la juventud se le de una alternativa habitacional y se pongan a su disposición pisos asequibles a su situación económica que permitan su emancipación".

Los pisos, propiedad del Ayuntamiento de Vitoria, se adjudicarán el año que viene. De momento, son solo 10 aunque podrían llegar hasta 130 si se suman las viviendas de la Avenida de Olarizu. Son pisos para jóvenes con menos de 31 años que tendrán que pagar entre 150 y 400 euros al mes en función de sus salarios.

Urtaran pretendía que los jóvenes también realizaran trabajos comunitarios con asociaciones o colectivos sociales de los barrios a los que se iban a mudar los jóvenes. Según el Ayuntamiento, con el objetivo de facilitar su integración y como contraprestación al esfuerzo de la institución para ofrecer alquileres a un precio más bajo que el de mercado. Esa cláusula se va a eliminar. 

El alcalde ha criticado a la oposición por su rechazo a este requisito y ha recordado que nadie levantó la voz cuando en 2017 está cláusula se incorporó a un sorteo de viviendas que finalmente tuvo que suspenderse. Tampoco ningún grupo municipal rechazó la idea cuando se incluyó en el IV Plan Joven de Vitoria. Urtaran considera que la oposición se mueve por intereses electoralistas. 

La decisión no es oficial todavía a la espera de que el consejo de Ensanche 21 -la sociedad municipal propietaria de las viviendas- se reúna este mes de noviembre. Allí se aprobarán las bases para la adjudicación de las viviendas. En cuestión está todavía si el Ayuntamiento realizará un sorteo o recurrirá a la lista de Etxebide sobre demandantes de vivienda en alquiler.