Fernando León de Aranoa: "El cine es un arte efímero"
El director de cintas como 'Los lunes al sol' o 'Un día perfecto' ofrece una clase magistral bajo el título "En busca de historias". Habla del proceso de creación, de géneros, de formatos y de su visión sobre la industria cinematográfica en la actualidad.
Bilbao
Fernando León de Aranoa, director de cintas como Los lunes al sol, Familia o Un día perfecto clausura el Festival Sundance Shorts 2017 con una clase magistral bajo el título "En busca de historias" en el Museo Guggenheim de Bilbao, organizado por SundanceTV.
Se podría decir que este director, guionista y productor comenzó a hacer cine por casualidad. Tras perderse la prueba para estudiar Bellas Artes, su primera opción de futuro, se matriculó en Imagen y Sonido en la Universidad Complutense, por casualidad. Pero no sería hasta un curso de guion cuando descubrió que el cine era su verdadera vocación.
Así, se inició en la industria con el cortometraje Sirenas, hace ya veintitrés años. Sin embargo, este no fue su primer trabajo como guionista, ya que previamente había trabajado en programas como Un, dos, tres, responda otra vez y había creado algunos diálogos de Martes y 13.
Los inicios de León de Aranoa
El paso a la dirección surgió tras la llamada de un director que le pedía recortar el guion. Ante su negativa, escuchó una frase que le hizo lanzarse a dirigir: “Estáis en casa con el gato y el café y no sabéis lo que es dirigir”. En su clase magistral, el director confesó que, en efecto, la situación era tal y como su interlocutor la había definido. “Sabía que tenía que dirigir para ser mejor guionista”, se dijo a sí mismo en aquel momento.
Así, se puso por primera vez detrás de la cámara en Familia, película con la que ganó el Goya a la Mejor Dirección Novel en 1997. Después vendrían nueve cintas más, entre las que han destacado Barrio, Los lunes al sol, Princesas o Política, manual de instrucciones. A pesar de embarcarse en la dirección, el director nunca ha abandonado el proceso de escritura y es el guionista de todas las películas. Además, las produce.
A pesar de producir sus cintas, no escribe pensando en el presupuesto, aunque, confiesa, “intenta que haya las menos limitaciones posibles”.
Respecto a los géneros, casi la mitad de su filmografía son documentales. Sin embargo, León de Aranoa prefiere la ficción. El documental le ha servido a lo largo de su carrera como un contrapunto a la ficción y confiesa que éste “tiene un punto de egoísmo: tienes un aprendizaje en lo personal enorme, te acercas a personajes a historias a las que normalmente no tendrías acceso”, confiesa el director. Sin embargo, elige la ficción porque en ella ve un pequeño milagro: “Me gusta trabajar con personajes, verlos crecer, me parece que hay algo muy hermoso ahí. Y luego tratar de que eso se convierta en una historia sobre una pantalla y que si sale bien llegue a tener esa verosimilitud que te emocione, que te haga reír”.
Podemos y Pablo Escobar
Uno de los documentales más sonados de Fernando León de Aranoa tiene como título Política, manual de instrucciones y en él cuenta cómo fue el proceso de formación de Podemos hasta las primeras elecciones generales a las que concurrió el partido. Para ello, el cineasta se introdujo en las entrañas del partido, convivió con Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero, Íñigo Errejón y demás integrantes de la formación. Una experiencia que él mismo define como enriquecedora, “porque es algo que no vas a volver a hacer y el momento de hacer una película era aquel”.
Ahora, trabaja con una nueva historia, basada en hechos reales. El personaje protagonista es Pablo Escobar, pero desde una nueva perspectiva. La historia nace del libro de la periodista colombiana Virginia Vallejo y cuenta la relación amorosa que ésta mantuvo con el narcotraficante. Escobar es una historia protagonizada por Javier Bardem y Penélope Cruz y en la que el director ha tratado de mantener el espíritu de la novela. Para ello, ha evitado ver las distintas ficciones que se han hecho sobre el personaje como Narcos, de la que sólo ha visto dos capítulos, o Escobar, paraíso perdido. En este último caso, le resultó más complicado alejarse de la historia puesto que Benicio del Toro compaginó el rodaje de la misma con el de Un día perfecto, por lo que, confesó León de Aranoa, “hablaron mucho del personaje y de la historia”.
De dónde surgen las historias
Como buscador de historias, León de Aranoa sabe que el primer paso es “estar dispuesto a hacer historias, tener curiosidad, estar atento y que te interesen las cosas que te rodean”. Esta es la norma suprema de sus guiones. Por ello, cree que su cine es una prolongación de sus desvelos: “Tenemos preocupaciones sociales, como ciudadanos nos interesan ciertas cosas y mis guiones son una prolongación de mis inquietudes”.
Se define como un director fiel a sus guiones y que siempre ha pedido a los directores que fueran fieles a los textos que él escribía: “Donde pone coma, es coma. No es un punto, es una coma”, explicaba en modo de anécdota al auditorio en su clase magistral.
Pero no solo a otros directores, esta exigencia también se la traslada a sus actores. Trata de reunirse con ellos para que entiendan sus ideas y las puedan llevar a cabo. “Me gusta estar muy cerca de los actores”, confiesa el director. Y a raíz de esto, recordó una de sus películas, Princesas, de la que es protagonista Candela Peña. “Con Candela Peña tuve varias reuniones de varias horas y después de muchos días, íbamos por la página catorce del guion”, confesó entre risas el cineasta.
El cine hoy
Como ciudadano, él mismo confiesa que su cine es una prolongación de sus inquietudes. Entonces, ¿de qué hablaría como cineasta si le pidieran un guion sobre la industria del cine en a actualidad?
En primer lugar, define su profesión como “un oficio estupendo, pero difícil”. Para él, la industria del cine es un sector muy cambiante: “No se parece en nada a lo que yo hice en mis primeras películas”. Confiesa que, a día de hoy, “el cine es un arte efímero: estás tres años trabajando en una película para que luego esté un mes en las salas”.
El modelo cambiante de la industria no solo está en la creación o en el tiempo en sala de las películas, sino también la legislación. Recordaba León de Aranoa, a modo de ejemplo, el cambio en el patrón de ayudas a las producciones que se anunció hace, aproximadamente, siete años: “Era un modelo que se supone que iba a ofrecer degradaciones fiscales a la producción en cine, pero nunca llegó”.
Pese a todo esto, el director nunca ha perdido la ilusión por hacer aquello que le apasiona, por hacer cine: “Si te gusta lo suficiente, es un veneno, pero es muy bello”.
Nuevos formatos
El director confesó al auditorio que no ve series por falta de tiempo. Sin embargo, anunció que tiene ofertas para llevar a cabo una ficción televisiva. Algo que aún está parado puesto que se encuentra inmerso en trabajo de su próxima película, Escobar.
Ahora, tras más de veinte años como director, confiesa sentirse cómodo en esa posición, aunque lo que de verdad le gusta es escribir sus guiones. Un director, guionista y productor que se ha encontrado con muchas negativas en su trayectoria. Sin embargo, tras Sirenas, recibió la llamada de Elías Querejeta, que sería su compañero de viaje hasta 2013 y que una de las cosas que más admiraba del cine de León de Aranoa es que “nunca sabe lo que va a hacer con sus guiones”, el motivo por el que tantos productores se asustaron en su día.