Que la vida iba en serio...

"Que la vida iba en serio, uno lo empieza a comprender más tarde" dejó escrito Gil de Biedma. Y aquí estamos, pagando una a una todas las facturas de algo muy serio. Barcelona se ha quedado sin la Agencia Europea del Medicamento. Se la lleva Amsterdam. Pierde Cataluña y pierde España. Barcelona cayó en la primera ronda, lo que indica que llegó descartada a las votaciones.

El daño de la inestabilidad política iba en serio y poco a poco vamos comprobando hasta donde llega.

No sabemos todavía si esa ha sido la única razón que dejó fuera de la carrera a una buena candidatura técnica como era la de Barcelona. En este tipo de decisiones juegan muchos y variados factores. Pero si 2.500 empresas se han ido de Cataluña asustadas por el empeño de sus dirigentes en violar la ley, en ser independientes por las bravas y todavía hoy siguen hablando de la República Catalana, si esos dirigentes culpan día sí y día también a la Unión Europea de su fracaso, la lógica dice que es normal que se lo piensen quienes tienen que votar y decidir el futuro de un gigante con mil empleos directos, cuatro mil indirectos y visitas anuales de 35 mil personas.

No se acaba el mundo aquí, vendrán otras oportunidades para Barcelona, pero quienes frivolizaron con no respetar las reglas, quienes jugaron con fuego tienen hoy las manos un poco más chamuscadas.