Las espinacas, el secreto de la fuerza de Popeye
Este 26 de marzo es el Día Mundial de las espinacas. Aquí algunos de los beneficios de consumir esta hortaliza
Madrid
Popeye, el marino es el mejor publicista del consumo de espinaca en el mundo. Pero, ¿qué tan cierto es que la espinaca nos da fuerza?
Dentro de sus propiedades destacan las vitaminas A, E, yodo, fibra, minerales (calcio, hierro, potasio, magnesio, manganeso y fósforo) y antioxidantes. Es entonces que la hortaliza favorece la formación del ADN y los glóbulos rojos, por lo que es recomendable en la dieta de una gestante o de una mujer que planea estarlo.
Sin embargo, el mito de que las espinacas otorgan súper poderes a Popeye radica en un error decimal del químico Erich von Wolf. En 1870, el científico alemán obvió poner una coma decimal en los resultados de sus estudios sobre el hierro en hortalizas de hojas verdes, de manera que los 3,5 miligramos de hierro presentes en 100g de espinacas, se transformaron en 35 miligramos de hierro. Diez veces más de su valor real.
Pese a que el error se corrigió en 1937, Popeye ya tenía fama por combatir al malvado "Brutus" tras comer aunque sea unas hojas de su hortaliza favorita. Desde entonces, en el imaginario mundial, permanece que las espinacas siguen siendo un alimento que da fuerza.
Este 26 de marzo es el Día Mundial de las Espinacas y la mejor manera de celebrarlo es comiéndolas en frescas ensaladas, cocidas o fritas.
Las espinacas benefician la visión, ayuda a promover la energía y la vitalidad, favorecen la digestión y ayudan a perder peso.
Otro estudio publicado en The Journal of Nutrition y realizado en ratas, ha revelado que la espinaca contiene nitrato inorgánico natural que controla la hipertensión y ayuda a desarrollar músculos más fuertes.
Su consumo debe ser moderado, pues es rica en ácido oxálico, el que combinado con minerales, forma oxalatos que podrían afectar a pacientes de gota, artritis o artrosis.
Una dieta rica en hierro debe incluir este vegetal. De no contar con ellas en la nevera, pueden ser sustituidas por verduras de hoja verde oscura, acelgas, col, perejil o semillas de sésamo.