El presunto testaferro de Rato regresa a la prisión de Soto del Real
El empresario mejicano Alberto Portuondo continuará internado en la cárcel madrileña ante la persistencia del riesgo de fuga y la posibilidad de destrucción de pruebas
Madrid
Durante más de dos horas, Alberto Portuondo, el presunto testaferro de Rodrigo Rato, ha sido interrogado en el juzgado de instrucción número 31 de Madrid, el órgano jurisdiccional que investiga esta causa que viaja directa hacia la Audiencia Nacional.
La inhibición que ha sido cursada indica que acabará en esos juzgados centrales de instrucción, principalmente porque se ha detectado el delito de blanqueo de capitales en el extranjero, un delito que investiga la Audiencia Nacional.
Alberto Portuondo está imputado por este delito y otro más de corrupción entre particulares. Unos 800.000 euros que, según los investigadores, proceden de Portuondo llegaron, presuntamente, a una empresa de Rato. Unos movimientos que se producen cuando Rato era presidente de Bankia.
Ante estos indicios, el interrogatorio ha sido lo bastante importante como para que la fiscal anticorrupción, Elena Lorente, suspenda sus vacaciones y haya participado en esa toma de declaración.
El secreto del sumario sigue activado, pero fuentes jurídicas, han señalado que Portuondo ha contestado a todas las cuestiones planteadas y ha colaborado estrechamente con el juez.
Su abogado defensor, Javier Espiga, ha manifestado a la salida de los juzgados que produciendo una serie de informaciones sobre este asunto que no son ciertas y en breve se podrá demostrar.