El fiscal Molins ha anunciado que en la redada y asalto de la pasada noche no se ha detenido ni a Abdel Hamid Abaaoud, supuesto cerebro de los atentados, ni a Salah Abdeslam, uno de los terroristas huidos desde el pasado viernes. Pero no se puede descartar que alguno se encuentre entre los muertos porque los cuerpos encontrados están en un estado que dificulta su identificación. Tanto, que el fiscal de la República no puede concluir todavía si hay dos muertos o más entre los escombros. “Las identificaciones no están determinadas. Sólo puedo afirmar que Abdel Hamid Abaaoud y Salah Abdeslam no figuran entre los detenidos”, ha informado el fiscal. Varios medios americanos y belgas insisten, citando fuentes de la investigación, que Abaaoud está entre los cadáveres hallados. Sí ha mencionado Molins que una mujer se inmoló activando su chaleco con explosivos. Según medios franceses, la joven tendría relación con el supuesto cabecilla de la célula que diseñó los ataques. Los servicios secretos seguían la pista de una mujer familiar de Abaaoud que aparece en varios vídeos violentos de Dáesh en Siria. En total se han practicado ocho detenciones, tres dentro del apartamento, dos fuera de él y otros tres en la calle. El fiscal no duda de la peligrosidad del comando recién neutralizado. “En vistas del armamento, de su organización estructurada y su determinación, todo hace pensar que ese comando podía pasar al acción”. Horas antes, el titular del Interior había explicado en la Asamblea que la célula terrorista neutralizada estaba lista para atentar en París. Más de 800 policías han disparado unas 5.000 balas en esta operación de siete horas en Saint-Denis. Por lo demás el fiscal ha confirmado que en los atentados del viernes participaron tres comandos, con tres coches, un Seat, un Clio y un Polo. También se investiga un Golf que llegó de Bélgica para prestar auxilio al octavo terrorista todavía huido.