Francia y EEUU tiran del carro del clima
Los discursos de Obama, Hollande y Merkel piden los mayores esfuerzos a los 150 jefes de estado que asisten a la Cumbre del Clima de París
París
Como suele ser habitual, el discurso del presidente de Estados Unidos era el más esperado y Obama no ha querido decepcionar a sus seguidores más ecologistas: con mucha convicción ha pedido que se adopte en París un acuerdo "ambicioso" y "con objetivos" para frenar el cambio climático. Además, ha recordado que su país se ha comprometido ya a reducir sus emisiones de CO2 un 28% en 10 años y ha advertido a los líderes de la comunidad internacional que "el mundo nos está escuchando y ebemos actuar ahora y hay que aceptar esste reto".
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De lo contrario, Obama ha presentado un futuro desolador con países sumergidos, ciudades abandonadas, campos sin cosechas y problemas políticos por todo el orbe. Pero también ha explicado ante el plenario de la COP21 que hay soluciones para paliar el problema del cambio climático y que ya ha habido progresos. Y ha puesto como ejemplo que 177 países hayan presentado sus propios planes voluntarios de reducción de emisiones.
El anfitrión
Ya nadie duda de que hay que avanzar en esta senda tras el fracaso de la Cumbre de Copenhague, hace seis años, pero el anfitrión de esta cumbre, el presidente francés Francois Hollande y el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, han pedido más "solidaridad y flexibilidad" para poder firmar un acuerdo vinculante y revisables cada cinco años.
Pero en los discursos de los hombres y mujeres más poderosos de la Tierra prácticamente no se han producido grandes novedades, aunque las delegaciones de los 196 países que asisten a la vigésimo primera cumbre de la ONU sobre el cambio climático mantienen un moderado optimismo.
Fase Técnica
Tras los grandilocuentes discursos y las fotos oficiales, ahora comienza la verdadera cumbre: la fase técnica, en la que miles de delegados se reunirán en múltiples salas durante turnos casi interminables y divididos por campos de actuación (mitigación, adaptación, fondo verde...). De estas negociaciones tiene que salir un principio de acuerdo antes de que la próxima semana lleguen aquí los minitros de medio ambiente. Ahora el borrador tiene más de 50 páginas, pero tiene que quedar en menos de la mitad y lo más importante de todo: hay que fijar los objetivos de reducción y el calendario de aplicación para que la temperatura media de la Tierra no suba más de 2 grados centígrados, la auténtica "línea roja" según advierten ya todos los informes científicos.
Javier Gregori
Periodista especializado en ciencia y medio ambiente. Desde 1989 trabaja en los Servicios Informativos...