Rivera espera que Sánchez sea leal al acuerdo aunque fracase
La cúpula de Ciudadanos no cree que Rajoy vuelva a optar a la presidencia
Madrid
Desde hace varias semanas en Ciudadanos dan por muerto políticamente a Mariano Rajoy. Algunos piensan que el PP acabará facilitando la investidura de Sánchez, otros confían en que una nueva cara, más joven, dé opciones a los conservadores e incluso hay quien, como el propio Rivera, prevén que Rajoy se enrocará y no habrá manera de cambiar de candidato. Por eso, la Ejecutiva lo ha apostado todo a Pedro Sánchez, con el argumento de que fue a él a quien el rey designó. A cambio del apoyo, por el que la formación soporta ya la presión del PP, Rivera exige a Sánchez que sea "leal" con el acuerdo que alcanzaron y advierte de que solo arroparán al aspirante socialista si defiende "explícitamente" el pacto de gobierno de la pasada semana.
Más información
Ese clima de consenso peligró este lunes por momentos cuando los socialistas buscaron el apoyo de Podemos, Izquierda Unida y el resto de las candidaturas de unidad popular. A pesar de que el propio portavoz del PSOE avisó al de Ciudadanos de esa oferta, y se comprometió a consultarle antes de cerrar cualquier otro acuerdo, el acercamiento a la formación de Iglesias provocó cierto recelo. Algunos diputados mostraban en privado cierta inquietud. Reconocían no fiarse de las pretensiones de Sánchez que en el texto omitía varias de las medidas selladas con Ciudadanos, como el modelo laboral, el compromiso a trabajar para impedir un referéndum en Cataluña o la supresión de las diputaciones provinciales.
Horas antes del debate de investidura, el partido avisaba de que su apoyo a Sánchez estaba condicionado a que el candidato socialista defendiera explícitamente el acuerdo pactado. Según el secretario general del grupo parlamentario, "no van a aceptar que se cambie una coma de ese documento". "Confiamos en que el acuerdo que vaya a la investidura sea el que hemos firmado con el PSOE y que ha ratificado la militancia del PSOE", aseguraba José Manuel Villegas, jefe de gabinete de Rivera.
El partido espera lealtad por parte del secretario general de los socialistas aunque fracase en su primer intento. Fuentes del partido reconocen que si el 6 de marzo Sánchez no consigue ser investido presidente, seguirán trabajando para que documento pactado se convierta en la hoja de ruta del próximo gobierno, esté liderado por el PP o por el PSOE. Esos mismos dirigentes se limitan a asegurar en público que darán prioridad al candidato que el rey designe si abre una nueva ronda de contactos. En privado reconocen que no creen que Rajoy reciba el encargo porque el presidente en funciones tiene los mismos apoyos que cuando declinó. Ahora, la suma de los diputados de Ciudadanos y PSOE (130) supera a la del PP (123).
La formación confía en que la decisión del monarca les permita mantener su apoyo al candidato de Ferraz. Mientras tanto apelaran a la responsabilidad del Partido Popular, al que acusarán de votar junto a Podemos para impedir que haya un gobierno constitucionalista, que respeta la unidad de España o la permanencia en la Unión Europea.