"Ya nadie podrá decir que el PP no se financió de forma ilegal"
Fuentes de la Fiscalía Anticorrupción responden así ante la firma de la condena en conformidad de los nueve empresarios que asumen haber pagado tres campañas electorales del PP a cambio de obra pública, para atenuar sus condenas hasta un máximo de 21 meses de cárcel y multas cercanas a los 30.000 euros
Francisco Camps durante su intervención en un mitin en Elche (Alicante) en 2008. / MORELL (EFE)
Madrid
Siete de los nueve empresarios que alcanzaron el principio de acuerdo con la Fiscalía Anticorrupción han rubricado este viernes el pacto, y los dos restantes, los hermanos Martínez Berna, se han comprometido a hacerlo el lunes.
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Un acuerdo que acarrea penas de tres meses de prisión por cada delito electoral de los que han sido acusados – y hay hasta tres delitos de este tipo en juego para cada uno-, y 12 meses de cárcel por el delito de falsedad en documento mercantil por el que los nueve están acusados. Las multas ascienden a un máximo de unos 30.000 euros para cada uno.
Con el pacto, los empresarios admiten que financiaron de forma ilegal al PP de Valencia en las elecciones municipales y autonómicas de 2007, y en las generales de 2008, incluidos dos actos electorales aquel año de Mariano Rajoy. Tanto el mitin multitudinario de la plaza de toros de Valencia, como el acto IFA en Alicante.
En total, pagaron 1.2 millones de euros a Orange Market, por los actos que el PP encargaba a esta empresa de la Gürtel. A cambio, se aseguraban obra pública. Para fuentes de la Fiscalía Anticorrupción conocedoras del acuerdo, con esta condena en conformidad “ya nadie podrá decir que el PP no se financió de forma ilegal”.
Los empresarios han acudido temprano a la sede de Anticorrupción y han ido pasando uno a uno a rubricar el acuerdo. El primero en hacerlo ha sido Vicente Cotino, el sobrino del expresidente de Les Corts y exdirector general de la Policía, Juan Cotino. También han asumido el pacto Alberto Batalla, Enrique Ortiz, José Francisco Beviá, Antonio y Alejandro Pons Dols y Enrique Gimeno. Ninguno ha querido hacer declaraciones. Solo este último ha concedido a la SER que ha pasado “un mal trago”.
