Rajoy quiere salir de la moción "reinvestido"
En el PP dan por hecho que Rajoy intervendrá pero en la Moncloa juegan con el factor sorpresa. Por pura estrategia, esconden sus cartas
Mariano Rajoy, durante el recibimiento al presidente de Perú en Moncloa / JUAN MEDINA (REUTERS)
Madrid
En las filas populares están convencidos de que Mariano Rajoy se ha estado preparado para el cuerpo a cuerpo. Recuerdan que en las dos mociones de censura pasadas, el presidente del Gobierno tomó la palabra. Esperan que él haga lo mismo porque es “un gran parlamentario que no teme el combate”.
Una lucha para la que están todos listos en el Gobierno. En Génova piensan que la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, tendrá “un papel relevante”. Y no se descarta que también participe buena parte del Ejecutivo. Por eso, Rajoy ha pedido a todos sus ministros que se preparen “a conciencia”. Pueden hablar cuando lo consideren oportuno, en cuanto se sientan interpelados.
Aunque los que rodean a Rajoy desean evitar un debate tan bronco como el que vivió Cristina Cifuentes. “Puede haber algún destello pero no queremos un circo”, dicen varios diputados. Por eso su intención es modular el tono. “No se puede convertir a Pablo Iglesias en un héroe. Tampoco en una víctima. No podemos darle cancha para el estrellato mediático que busca”, señalan desde el Comité de Dirección de Génova.
Aunque los populares saben que será bastante difícil evitarlo porque creen que van a enfrentarse a un monográfico sobre corrupción. Además, de muchas críticas por la amnistía fiscal, que la semana pasada tumbó el Tribunal Constitucional. Algo que desde el Ejecutivo se va contrarrestar, destacando que vivimos en un régimen democrático en el que las instituciones funcionan.
Pero también son conscientes de que esta cita puede socavar la imagen del Gobierno y les preocupa porque desde fuera se observa a España con lupa. En el PP presumen de haber sacado adelante los Presupuestos y defienden que la legislatura está encarrilada. Pero el panorama es más complicado. Hay un ministro reprobado, Rafael Catalá, y otro, Cristóbal Montoro, lleva el mismo camino. Y, por si fuera poco, Rajoy tiene que ir a declarar como testigo en el juicio del ‘caso Gürtel’.
Muchas fotos que no son plato de buen gusto, al poner en juego el crédito del presidente. Por eso mismo, hace falta que en esta cita no se cuestione a Rajoy sino que, como dicen los suyos, salga de ella “reinvestido”. Para ello resaltaran que Podemos solo cuenta con el respaldo de ERC y Bildu. Resaltan, una vez tras otra, que la moción de censura no va a prosperar y piensan que el único objetivo de la formación de Iglesias es la de erosionar al PSOE en su labor de oposición. Y lamentan que, sabiéndolo, los socialistas, se decanten por la abstención en vez de por un 'no' rotundo.
