Los 'must' de una buena dieta

La clave para estar en forma es tener un buen metabolismo y eso se consigue con una dieta sana y equilibrada, es decir, consumiendo alimentos saludables, tal y como explica química y experta en nutrición Ángela Quintas. Pero también es importante hacer deporte, porque el metabolismo depende, sobre todo, de la masa muscular que tenemos en el cuerpo. A más masa muscular, mejor metabolismo y, por tanto, procesamos más rápido lo que comemos. Es decir, quemamos más calorías con menos esfuerzo. Por eso la clave para tener un buen metabolismo es hacer deporte y combinar bien los alimentos para que nos ayuden a subir esa masa muscular.

Una buena dieta consiste en aprender a comer, recuerda Quintas. No es bueno sentirse cansado o débil como ocurre con algunas dietas extremas o excesivamente estrictas, sino todo lo contrario: "hay que tener más energía y sentirse bien".

¿Qué debemos tener en la nevera para comer sano y no caer en la tentación? Lo que no puede faltar bajo ningún concepto es la proteína baja en grasas. ¿Y eso qué es? En palabras de Quintas, "todo lo que corre, vuela, salta, nada o repta" (pollo, pavo, pescados blancos, pescados azules, etc.). Son alimentos ricos en grasas, pero grasas saludables. También el aceite de oliva es una fuente de este tipo de grasas, además de ser un ingrediente imprescindible en nuestra dieta aunque de forma moderada.

Un básico de la dieta son los huevos, por su gran aporte protéico y de aminoácidos esenciales que el cuerpo no puede fabricar. Hay que tener muy presente a la hora de consumirlos que las grasas que contienen se encuentran en la yema mientras que la clara es la verdadera fuente de proteínas e ingerida por separado es magnífica.

Para los que prefieren algo dulce, las gelatinas también pueden proporcionar esa proteína pero ¡cuidado con la etiqueta! Hay postres con aspecto gelatinoso que no son gelatina y, por tanto, lo que tienen en su composición no es proteína sino hidratos de carbono.

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Los que también tienen proteínas así como hidratos y deben ser uno de los 'must' de nuestra nevera son los lácteos. Ahora incluso los hay con un mayor aporte de proteína. Es genial tomarlosa media mañana o como merienda y en general, es mejor comprar yogures desnatados y quesos bajos en grasa. Pero ¡ojo! que algunos como el parmesano -sí, sabemos que está delicioso- son una auténtica bomba de hidratos. ¡Fuera!

Los embutidos 'bajos en grasa' (¡ojo al dato!) nos pueden aportar la proteína necesaria a media mañana y en la merienda. Pero tienen que ser de máxima calidad para asegurarnos de que no lleven ni aditivos, ni conservantes, ni féculas.

"Nunca ir a la compra con el estómago vacío porque el cuerpo nos traiciona y nos pide azúcar, chocolate..."

Tampoco deben faltar en una buena dieta las verduras, que son una fuente importantísima de vitaminas, minerales y fibra. Tenemos que elegir, eso sí, las verduras que tengan el índice glucémico más bajo. O sea, que descartamos aquellas que son más dulces -y más apetitosas- como la calabaza, el maíz, la remolacha, los guisantes...

Con las que sí debemos tener cuidado y limitar su presencia en nuestro frigorífico son las grasas saturadas. Hay que evitar a toda costa aquellos alimentos que las contengan, como las mantequillas y margarinas, la bollería industrial, etc. Aunque estén muy ricas, no son buenas para nuestro organismo. Y no nos referimos solo a la hora de hacer dieta sino en general.