Rajoy responde a C's ante la mirada de un PSOE que insiste en su 'no' a Rajoy
El PP responderá a las seis medidas de Rivera, condiciones inamovibles para comenzar una negociación, el mismo día en que el PSOE reúne a su cúpula con el 'no' a Rajoy como bandera
Madrid
De la "abstención técnica" al "todo está abierto si se cumplen las condiciones". Esta era la oferta que hizo hace una semana el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, al candidato del PP, Mariano Rajoy, para desbloquear la situación. C's ofreció pasar de la abstención al 'sí' en un posible debate de investidura a cambio de cumplir una serie de condiciones. Eran 6 medidas, a las que se unió una petición, que no eran negociables y que los populares deberían comprometerse a cumplir si querían sumar 32 votos positivos para hacer a Rajoy presidente.
En primer lugar, la petición de Albert Rivera a Rajoy fue un paso al frente. El líder de la formación naranja dijo que sólo negociará con "candidatos que confirman fecha y hora a la investidura, no con no-candidatos". Después vinieron las 6 condiciones necesarias sine qua non para que ambas formaciones se sentasen a negociar. Esto fue lo que C's exigió al PP para convertirse en su aliado en la investidura:
- La separación inmediata de cualquier cargo público que haya sido imputado por corrupción política. "Los imputados no se sientan ni en los gobiernos ni en los escaños si Ciudadanos están en una negociación".
- Eliminación de los aforamientos. "Todos los cargos públicos que tengan que defenderse de un caso de corrupción política tendrán que ir a primera instancia. Se acabaron los privilegios, todos somos iguales ante la ley"
- Nueva ley electoral que contenga como mínimo estos principios: listas desbloqueadas –que se puedan escoger personas y no solo partidos-, mayor proporcionalidad y acabar con el laberinto del voto rogado
- Acabar con los indultos por corrupción política. "No se puede anular la justicia con el compadreo entre amigos", asegura.
- Limitación de mandatos. La presidencia del Gobierno debe limitarse a 8 años o dos mandatos como en otras naciones del mundo.
- Transparencia. Creación de una comisión de investigación parlamentaria para el caso Bárcenas y la financiación ilegal del PP.
Tras este anuncio de Rivera, el resto de la oposición acusó a Rivera de ofrecerse para "lavar la cara al PP". A priori, eran una condiciones asumibles para los populares y una medida de presión al PSOE, ya que la suma PP-C's alcanza los 169 escaños, todavía a siete de la mayoría simple necesaria en una segunda vuelta para que Rajoy sea investido presidente. Incluso el propio Albert Rivera llegó a decir que parte de las condiciones que proponía ahora estaban por escrito en el acuerdo firmado por la formación naranja con los socialistas en la pasada legislatura. "Supongo que Sánchez no votará en contra de lo que defendió sobre la tribuna", llegó a decir el presidente de C's, que de paso trasladó la presión al PSOE de tener la responsabilidad de desbloquear el Congreso.
El camino a la investidura del candidato popular parecía muy despejado, o eso parecía antes de la comparecencia de Mariano Rajoy, que volvió a recuperar la iniciativa de marcar los tiempos que le arrebató Rivera al anunciar que sometería a su Ejecutiva Nacional las condiciones que le planteaba C's. De este modo, Rajoy volvió a ganar tiempo para analizar con tiempo qué le proponía Albert Rivera a la vez que dejaba claro que no tenía claro si sólo el apoyo de C's le llevaría al Congreso a un hipotético debate.
Desde ahí no se ha decidido nada, ya que será este miércoles cuando la cúpula del PP valore las propuestas de Rivera, pero si que ha habido varios miembros del PP que han apuntado que puede ser que haya alguna matización en alguna de esas condiciones. Los vicesecretario Pablo Casado y Fernando Martínez Maíllo han dejado varias veces la puerta abierta a una contraoferta de los populares, que anticipan un 'sí' pero con matices. Tanto es así que incluso este martes, el secretario de Comunicación de Ciudadanos, Fernando de Páramo, ha vuelvo a recordar que sus condiciones no son negociables y que incluso no descartan la posibilidad de cambiar su abstención por un 'no' si el PP no muestra voluntad real de cambio.
A la expectativa de que respuesta de Rajoy a Rivera este miércoles está el PSOE, al que le han llovido las presiones desde izquierda y desde derecha. Los grupos a su izquierda, mayoritariamente Unidos Podemos y sus confluencias, han instado en varias ocasiones a Sánchez a explorar una vía alternativa, intentando sumar por la izquierda y así traspasar la presión de desbloquear la situación a otras formaciones. Al otro lado, tanto PP como Ciudadanos, que apelan a sus responsabilidad y a una gran coalición que devuelva la estabilidad a un gobierno que lleva muchos meses en funciones.
Desde el PSOE insisten en su 'no' a Rajoy, una postura acordada en el Comité Federal y de la que ningún barón socialista se ha movido hasta el momento. Algunos han realizado alguna tímida propuesta, como la enunciada en 'El País' por Miquel Iceta este martes de buscar un candidato alternativo a Rajoy si el popular no consigue los apoyos, pero sin poner en duda el 'no' socialista.
Con este panorama se reúne este miercoles también la Comisión Permamente del PSOE, que entre presiones de uno y otro lado se reúne para preparar el discurso de Pedro Sánchez en el eventual debate de investidura de Rajoy en el que su voto será, según fuentes socialistas, negativo. Los socialistas preparan así su artillería tras la presión que le llega de todos los lados pero se muestran convencidos de que Rajoy anunciará una fecha para el debate de investidura.
Fernando Rodríguez
Coordinador del área digital de deportes de Cadena SER desde 2021. Previamente, estuve casi siete años...