Rajoy no se atreve a pronosticar una legislatura larga
El presidente guarda silencio cuando se le pregunta qué modificaciones haría en la Constitución. Al Ejecutivo le preocupa abrir el melón y que un 10% pida un referéndum
Sáenz de Santamaría dice que hay “buena sintonía” con Puigdemont y espera que acuda a la Conferencia de Presidentes porque será “una reunión de contenidos y no una ceremonia”
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante el acto celebrado en el Congreso con motivo del 38 aniversario de la Constitución. / Chema Moya (EFE)
Madrid
En el acto del 38 aniversario de la Constitución, Mariano Rajoy ha insistido en que lo importante de la reforma de la Carta Magna es saber qué es lo que se quiere modificar. En un corrillo con periodistas, se le ha preguntado qué cambiaría él. "No contesto", esa ha sido su respuesta literal. El jefe del Ejecutivo, quien siempre pide a sus adversarios políticos concreción, no ha querido entrar en detalles.
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Lo que le preocupa es que se abra el melón constitucional y, entonces, un 10% de la Cámara pida un referéndum. Si eso ocurre, no se podrá impedir. Algo que para el Gobierno es un peligro. Para Rajoy todo esto no está en su hoja de ruta. A su juicio, lo vital para nuestro país son las pensiones, el Pacto educativo, la violencia de género y el sistema de financiación autonómico. Es lo que considera importante de una legislatura que no ha querido decir si va a ser o no larga. "Es imposible pronosticar nada. No me atrevería a decirlo", ha comentado.
Desde la Moncloa piden "prudencia" y "consenso". Pero reconocen que esto último, en estos momentos, no existe. "Son buenos deseos pero es imposible que la reforma salga adelante en la situación actual", comenta un senador. "Con un tercio echado al monte no se puede hablar", señala un dirigente territorial. Para Rajoy no basta con PSOE y Ciudadanos. A él le gustaría abordar este asunto contando con el visto bueno de la inmensa mayoría. Cree que hay puntos -como cambiar el artículo 135, para consagrar el principio de estabilidad- que se pueden resolver entre dos formaciones pero no el resto.
Rajoy ha admitido que en estos días ha sido "muy difícil" negociar el techo de gasto con PSOE y Ciudadanos. Pero ha señalado hasta en tres ocasiones que está "muy contento" con el resultado porque, con ello, se traslada un buen mensaje a Europa: España genera confianza. También ha asegurado que aún no se ha empezado a hablar de Presupuestos. "Eso es harina de otra costal", han sido sus palabras. De todos modos, como ha señalado, "la clave de la negociaciones, es no contarlas".
También ha hablado con los medios, Soraya Sáenz de Santamaría. La vicepresidenta ha comentado que muchas de las cosas que pide, por ejemplo Iñigo Errejón de Podemos, se pueden acometer sin retocar la Constitución como el tema de regular los lobbies y el de suprimir aforamientos. Al menos los autonómicos, si se quisieran retocar los Estatutos de las Comunidades.
Además, ha señalado que hay buena sintonía con Carles Puigdemont y su vicepresident, Oriol Junqueras. Espera que el president de la Generalitat acuda a la Conferencia de Presidentes porque no va a ser "una ceremonia sino una reunión de contenidos".
