Podemos y Rajoy: las ocho frases de un pulso de 8 horas

Madrid

Tres oradores. Ocho horas. La moción de censura impulsada por Unidos Podemos contra Rajoy, abocada al fracaso ante la falta de apoyo parlamentario, ha servido de termómetro de la situación política tras ocho meses de Gobierno. El presidente y toda la bancada popular han escuchado durante casi cinco horas las duras intervenciones de Irene Montero y Pablo Iglesias. La portavoz de la formación morada ha enumerado todos los escándalos de corrupción que rodean al PP y ha denunciado el uso partidista de las instituciones mientras el líder de Podemos ha esbozado las principales líneas de su alternativa política para regenerar la vida pública. Rajoy, que había escondido sus cartas por estrategia, ha dado réplica a ambos para desacreditar la propuesta apelando a la estabilidad política y sacando pecho del resultado en las urnas. Estos son los mejores dardos del largo debate que han mantenido:

"La corrupción tiene sede y está en Génova 13"

Pasadas las nueve de la mañana, Irene Montero subía a la tribuna y tomaba la palabra para interpelar al Gobierno. En un discurso de más de dos horas, la portavoz de Unidos Podemos ha desplegado toda la artillería contra Rajoy por los sucesivos escándalos de corrupción. Ha enumerado más de 60 casos en los que están implicados cargos populares y ha exigido que pidan perdón “y devuelvan todo lo robado”. “España está harta de que le roben”, ha rematado la diputada, que también ha tenido palabras para Ciudadanos y el PSOE por permitir la investidura de un “presidente que es un fraude”

"Su única pretensión es dar el espectáculo"

Terminada la extensa intervención de Montero, muy aplaudida por sus compañeros, el hemiciclo ha vivido unos pocos segundos de expectación. Ni el Gobierno ni el PP habían querido confirmar quién daría la réplica a los oradores de Unidos Podemos. Guardaban sus cartas pero admitían que Rajoy había estado trabajando para aguantar el cuerpo a cuerpo. Mientras la vicepresidenta seguía tomando notas, el presidente ha respondido a la larga lista de reproches y acusaciones de la diputada morada. Rajoy, como ha hecho desde que se anunciara la moción, ha restado importancia a la iniciativa. "Su única pretensión era dar el espectáculo. No se pretende cambiar de Gobierno, no es más que un juego", ha espetado. Del discurso de Montero se ha limitado a decir que “ha sido una catarata de calamidades” y, sobre la corrupción, cree que el PP ha hecho reformas para combatirla. “Esta lacra no acabará porque me presenten esta moción de censura o arrojen piedras contra el PP”, ha asegurado el jefe del Ejecutivo. 

"Va a pasar a la Historia como el presidente de la corrupción"

Pablo Iglesias ha adoptado un perfil más institucional tras la dura intervención de Irene Montero. El líder de Podemos, con un tono más comedido en la tribuna que en anteriores intervenciones, ha articulado también su discurso a partir de la corrupción. "No es normal que haya un partido en el Gobierno con más investigados por corrupción que diputados caben en el Congreso”, le ha recordado a un Rajoy impasible. "Esta forma de Gobierno que llamamos corrupción tiene costes para la gente corriente", ha añadido antes de esbozar las líneas maestras de su alternativa de Gobierno con once medidas contra la corrupción y una batería de medidas en materia económica y, de lo que llaman, justicia social.

El mensaje al PSOE: "No nos digan que es posible con la muleta naranja"

El secretario general de Podemos también ha aprovechado sus casi tres horas para enviar algunos recados a la bancada socialista, que se abstendrá en la votación como forma de decir ‘no’ a Rajoy y a la propuesta de Iglesias. El PSOE le recrimina que impulsara la moción durante su proceso de primarias y sin una negociación previa en busca de apoyos, y además, siempre le recuerda al líder morado que tuvieron la oportunidad de sacar a Rajoy de la Moncloa pero votaron junto a él para impedir el Gobierno de Pedro Sánchez. "Ojalá nos pongamos de acuerdo para sacar al PP del Gobierno más temprano que tarde, pero no nos digan que es posible con la muleta naranja", le ha respondido Iglesias tras admitir sus posibles errores en estos meses. "Nos podemos equivocar, pero nosotros no robamos ni damos aire a los corruptos", ha sentenciado.

"Para perder, cualquier candidato vale, incluido usted"

En su segunda réplica a los diputados de Podemos, Rajoy ha sacado pecho de sus resultados electorales. El presidente defiende la legitimidad de su gobierno por el apoyo en las urnas y ataca a Iglesias porque cuanto más le conocen, más votos pierden. "Si quería asaltar los cielos, se ha equivocado de puerta […] España gana, ustedes pierden […] Soy partidario de que gobierne lo quien digan los españoles", ha presumido Rajoy.

"No sé si alguien con tantos amigos en la cárcel es muy de fiar"

Rajoy ha intentado presentarse como el único garante de la estabilidad del país y, tras sacar el ‘comodín’ de Venezuela como luego le ha recordado Iglesias, ha acusado a Podemos de exagerar y excederse con falsedades e imposturas. También ha reprochado a la formación morada su política de escraches, a lo que Iglesias ha respondido: “Ha dicho usted señor Rajoy que yo no soy de fiar, pero yo no sé si alguien con tantos amigos en la cárcel, es muy de fiar. Reconózcame que ya va siendo hora de que dejen ustedes de gobernar y lo haga alguien sin tantos amigos en la cárcel".

"Está usted muy bien donde está"

Tras el discurso y la primera réplica, Iglesias y Rajoy se han enzarzado en una serie de intervenciones cortas sin mucho contenido político sobre, entre otras asuntos, la cuestión de la soberanía nacional. El presidente ha reprochado su ambigüedad al líder Podemos, mientras éste le ha acusado de alentar el independentismo con sus decisiones sin buscar una solución. Enrocados de nuevo en la corrupción -“Soy partidario de gobierne quien digan los españoles”, decía Rajoy, e Iglesias le aconsejaba una “desinfección intensa en la oposición”- finalmente el presidente ha concluido: “Usted viene aquí a examinarse y no aprueba ni de lejos. Está usted muy bien donde está. No le veo merecedor de ser presidente ni a España de ese castigo”. A la espera de la votación y con las posiciones marcadas por cada partido, todos parece que se quedarán dónde están.