Rivera prioriza los asuntos sociales para amortiguar el "efecto Sánchez"

Madrid

Mucho se está debatiendo y escribiendo estos días sobre cómo afrontará a partir de ahora su futuro político más inmediato Ciudadanos, el partido que ha pasado de ser el sustento del Gobierno a la cuarta fuerza en el Congreso de los Diputados. Después de relamerse sus heridas, los de Albert Rivera han definido ya cuál será la fórmula o estrategia que seguirán para combatir “el efecto Sánchez” y buscar su sitio en el nuevo panorama político surgido tras la moción de censura a Mariano Rajoy.

Después de varias reuniones de su dirección (una de ellas realizada a modo de “convivencia” en una localidad a las afueras de Madrid”), fuentes de la formación presidida por Albert Rivera reconocen que las casas “han cambiado” y que están “en otra partida”. Sin embargo, para jugarla “poco o nada” van a cambiar su estrategia política, según adelanta un alto dirigente del partido a la Cadena SER.

La decisión es “no tocar nada” porque en Ciudadanos están convencidos de que “cuando repose” en las próximas semanas la llegada del PSOE al Gobierno “las cosas volverán a como estaban antes”, es decir, con el partido naranja como el preferido por los españoles en las encuestas. Los sondeos publicados en los últimos días coinciden en hundir al partido de Rivera de ese primer puesto hasta el tercero en intención de voto. Como media, Ciudadanos ha caído de un 28% de los apoyos registrados en abril a un 21% en la actualidad.

“No estamos tan mal”, explican en la dirección de Ciudadanos donde reconocen que esperaban “peores” resultados en las encuestas. “Partir de un 13%, subir a un 28% y caer hasta un 21-22% es asumible”, asegura a esta redacción un colaborador del entorno de Rivera.

El presidente de Ciudadanos ha marcado a su equipo un horizonte y una línea de acción a seguir. El horizonte es las explicaciones que pueda ofrecer Pedro Sánchez sobre “lo que quiere hacer en el Gobierno”. A expensas de lo que pueda explicar el presidente del Ejecutivo en su primera entrevista, prevista para este lunes en TVE, en Ciudadanos creen que Sánchez “está escondido”. No entienden por qué “tarda tanto” en explicar esos planes de Gobierno “en sede parlamentaria”.

Pero ante este horizonte, la opción de Ciudadanos escogida es la de la prudencia: “No vamos a criticar con dureza lo que hacen los ministros cuando el presidente no ha venido a explicar su programa de Gobierno”, nos subraya un alto dirigente de la formación naranja. De hecho, días después de que triunfase la moción de censura contra Rajoy y de que Pedro Sánchez formara nuevo Gobierno, Rivera llegó a dar la orden de que, de momento, no se criticara a los ministros hasta ver “qué hacían”. Y más cuando algunos de ellos habían recibido las alabanzas de Rivera en el pasado (véase los casos de Grande-Marlaska o de Borrell) y de que dirigentes del partido reconocieran que algunos nombres del gabinete también podrían formar parte de un Gobierno de Ciudadanos.

Sin embargo, la dirección de Ciudadanos advierte de que “esto no significa que no vamos a criticar a los ministros cuando haya que criticarlos”. Es más, en el partido naranja se sienten más libres ahora que cuando apoyaban al Gobierno del PP: “antes criticábamos con una mano y con la otra pactábamos; ahora no estamos tan atados”, nos reconocen en el núcleo duro del partido.

La agenda social y Cataluña

En Ciudadanos quieren mostrarse también como un partido que también tiene “agenda social”. Por eso, Rivera ha decidido priorizar estos asuntos, unido a su defensa por la unidad de España para hacer frente a los independentistas.

Con respecto a los asuntos sociales, hemos visto cómo estos días se reavivaba el debate sobre la gestación subrogada y que Ciudadanos quiere legalizar en España. Este partido también ha presentado su nueva Ley de Conciliación y mañana martes ha introducido el debate en el pleno del Congreso de otra norma que busca “acabar con la precariedad en el trabajo”.

Además, habrá un asunto donde Ciudadanos no ha bajado ni bajará la guardia: la unidad de España o el conflicto catalán. “Aquí sí estamos criticando al Gobierno porque nos preocupan los primeros pasos y gestos que está haciendo hacia los independentistas”, recalcan fuentes de la dirección. Y aquí Rivera ya ha marcado de manera fuerte su posición al anunciar este sábado desde Málaga que propondrá que una reforma de la Constitución que contemple un umbral del 3% de representación nacional para que un partido pueda entrar en el Congreso de los Diputados. Si se aplicara la medida ahora, los partidos nacionalistas e independentistas vascos y catalanes no podrían tener representación en la Cámara Baja.