Los Grammy se acuerdan de los muertos

Madrid

En 2010, Leonard Cohen recibió el Grammy honorífico a su carrera siguiendo la fórmula que tienen los grandes galardones para premiar a esos artistas a los que nunca encuentran hueco. Este 2017, un año después de la muerte del compositor, Cohen consigue sus dos primeras nominaciones por su trabajo póstumo You want it darker, candidato a mejor álbum tradicional de pop vocal -donde competirá con Bob Dylan, Michael Bublé y Chris Cornell- y por la canción Steer your way, que está nominada a mejor interpretación de música de raíces, donde también están Alison Krauss, Alabama Shakes, los Blind Boys of Alabama o Glen Campbell, fallecido este mes de agosto.

También debuta en los premios The War on Drugs con su espléndido A deeper understanding, uno de los mejores trabajos de este año que aspirará al galardón a mejor álbum de rock junto a Mastodon, Metallica, Nothing More o Queens of the Stone Age, que cuentan con ochos nominaciones y ningún premio hasta la fecha.

Llama la atención la presencia del álbum de Arcade Fire entre los mejores discos de música alternativa. La última entrega de los canadienses recibió duros palos de la crítica, pero su música encuentra acomodo en los Grammy. En 2010 ganó el premio a disco del año por The Suburns y en total suman nueve nominaciones. Sus rivales, sin embargo, serán de peso. Entre los favoritos figuran Father John Misty, candidato por su excelso Pure Comedy, o The National, que ya estuvieron nominados en esta misma categoría en 2013 (venció Vampire Weekend). Los otros dos rivales serán el regreso de Gorillaz y el estupendo American Dream de LCD Soundsystem.

Otro de los veteranos que reciben el reconocimiento de forma póstuma es Gregg Allman, de los Allman Brothers. El guitarrista, fallecido el 27 de mayo, recibe dos nominaciones. Competirá a mejor álbum de americana con Southern blood y a mejor canción de raíces por My Only True Friend. Sus máximos rivales serán Iron and Wine y sobre todo Jason Isbell and the 400 Unit con su poderoso The Nashville Sound. Allman ya contaba con un galardón y once nominaciones en su carrera solista y otro premio por su trabajo con los Allman Brothers.

Entre los regresos llama la atención el de los Rolling Stones. La banda británica competirá por el premio a mejor disco de blues tradicional por Blue and Lonesome, su regreso a los Grammy tras su anterior nominación en 2005. No están entre los ganadores desde la edición de Voodo Lounge en 1994. Otra británica debuta este año. Laura Marling está entre los nominados por primera vez gracias al maravilloso Semper Femina, un disco que también ha llevado a su productor Blake Mills a figurar entre los mejores productores del año. El excelente trabajo a Marling aspirará al premio a mejor disco de folk, donde también figura Cat Stevens por The Laughing Apple.

La presencia española también resulta llamativa. Vicente Amigo con su Memoria de los sentidos y Concha Buika con Para mí, están entre los candidatos a mejor disco de World Music, donde también figura Tinariwen, con su espléndido Elwan, y Diego el Cigala se ha colado en la categoría de mejor tropical latin album con Indestructible.