Mariano Rajoy ha descartado la dación en pago «con carácter general» o la «suspensión de los procedimientos de ejecución hipotecaria» porque «podrían dañar sin remedio la garantía hipotecaria e impedirían el acceso futuro de las familias a los préstamos». Así de rotundo ha respondido Rajoy al líder de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba, que le ha pedido una nueva ley hipotecaria y una moratoria de los desalojos hasta que esa ley entre en vigor. Rajoy ha asegurado estar «dispuesto a hablar» de los desahucios, pero ha advertido de que lo hará «con sentido común y sin demagogias». De entrada ha sostenido que «es necesario conjugar la protección del deudor con el funcionamiento adecuado del mercado hipotecario». Esto implica el rechazo a iniciativas como la generalización de la dación en pago (entregar el inmueble al banco y condonar así la deuda) o la suspensión de los procedimientos de ejecución porque «podrían dañar sin remedio la garantía hipotecaria e impedirían el acceso futuro de las familias a los préstamos». Rajoy ha hecho alusión al decreto ley para proteger a los deudores hipotecarios que ahora tramita el Congreso y al que el Grupo Popular va a introducir enmiendas para elevar los umbrales de exclusión social (y que, por ejemplo, más personas puedan acogerse a la reestructuración de la hipoteca), aumentar a tres los impagos del inquilino al banco antes de iniciar una ejecución y limitar los intereses de demora a tres veces el tipo del interés legal del dinero (en la actualidad al 4%), entre otras medidas. «Este es un tema difícil, complicado, en el que hemos intentado llegar a un acuerdo con ustedes, pero jamás hicieron nada. Ahora tienen una posición de máximos que cuando estaban en el gobierno no tenían», ha espetado el presidente, quien también ha recriminado a Rubalcaba que «tiene historia», porque «desde 2007 se dispararon las ejecuciones hipotecarias y las medidas tomadas por el PSOE fueron ninguna y ahora le dan lecciones a los que toman decisiones y medidas». «Maldita sea, por qué no arreglamos aquello» En su turno de réplica, Rubalcaba ha reclamado su «derecho a rectificar como partido» y ha reconocido que «cada vez que hay un desahucio y cosas en torno a los desahucios muy terribles», él piensa: «maldita sea, por qué no arreglamos aquello». El líder del PSOE ha recordado que intentó alcanzar un acuerdo en esta materia con el Partido Popular pero, según Rubalcaba, no lo consiguieron porque lo que solicitaban era un cambio de la ley hipotecaria, algo a lo que el PP se negó, pero que es lo que demanda la iniciativa legislativa ciudadana a la que el Congreso dio luz verde la semana pasada (al menos para discutirla), con el voto a favor de los populares. «Tenemos que encontrar una fórmula para las familias parecida a la que tienen las empresas cuando entran en pérdidas. Una fórmula de acuerdos, de búsqueda de quitas para tratar de evitar ese mal terrible que es que la gente tenga que abandonar su casa cuando no tiene donde vivir», ha instado Rubalcaba.