¿Qué dicen los programas electorales sobre comida y gastronomía?

Madrid

Si entendemos la gastronomía como el estudio de la relación del ser humano con su alimentación, los programas electorales del 26-J están repletos de referencias gastronómicas. Y las posiciones de los partidos no son tan distintas como a priori puede parecer. Todos coinciden, por ejemplo, en que algo hay que hacer para combatir la obesidad.

También genera consenso la voluntad de aliviar el ticket de compra de los celíacos. Pero no todo son coincidencias. Los alimentos transgénicos generan división y mientras que para algunos morir de hambre es comparable a un asesinato, otros se limitan a hablar de un mundo más justo y un sistema de cooperación más transparente.

También hay asuntos en los que las diferencias son sutiles y se aprecian mejor en el cuánto que en el qué, porque lo que un partido puede desarrollar en media página, otro puede zanjarlo en tan solo una línea. Que luego cumplan lo que dicen, claro, ya es otro cantar...

EL IVA DE LA COMIDA

Podemos prevé bajar hasta el 4 % el IVA de más alimentos y bebidas, siempre y cuando su consumo no sea "desaconsejable por motivos de salud pública" y, para compensar esa rebaja, contempla la aplicación de "un nuevo tipo del 25 % a los artículos de lujo".

Para el 20-D Ciudadanos proponía aplicar un IVA reducido del 7 % tanto a "los bienes de primera necesidad" que hasta ahora se beneficiaban del tipo superreducido (4 %) como a los los productos culturales y de hostelería (incluyendo bares y restaurantes) "que actualmente tributan al 10 %". Pero acaban de anunciar que renuncian a ello para ajustarse al "agujero del déficit" así que, como PSOE y PP, de momento no plantea cambios en el IVA.

ALIMENTOS SIN GLUTEN

Los cuatro partidos hablan del tema y coinciden en el objetivo de reducir el precio de los productos para celíacos, ya sea potenciando "acuerdos con la industria alimentaria" (PSOE) o mejorando su "tratamiento fiscal" (Ciudadanos). El PP es menos explícito, pero también propone evitar "la inequidad económica". Podemos va más allá y se fija como objetivo la aprobación de una Ley Celíaca que, además de permitir el acceso a los "alimentos básicos que garantiza la Constitución española" con ayudas directas a celíacos, "independientemente de su edad", también sirva para crear "un listado de alimentos sin gluten, de gestión pública para evitar clientelismos y especulaciones", o para incentivar la "venta de alimentos libres de gluten" en panaderías, bares y restaurantes.

LUCHA CONTRA EL HAMBRE

El PSOE recuerda en su programa que el 12% de la población mundial padece hambre crónica y que las 85 personas más ricas del planeta poseen la misma riqueza que 3.500 millones de pobres, por lo que se plantea el hecho de "ayudar a revertir esta situación" como un objetivo para España. Podemos propone además que la Ayuda al Desarrollo no responda a intereses comerciales o geoestratégicos.

Izquierda Unida va más allá y suscribe las palabras de Jean Ziegler, quien compara cada muerte por hambre con un asesinato, sumándose también a su idea de "crear un tribunal internacional para sentar en el banquillo" a los especuladores del precio de los alimentos.

El documento conjunto de Unidos Podemos propone aumentar los fondos de Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD) hasta el 0'7 % del PIB (un 0,4 en la primera legislatura). El PSOE se fija la misma meta, pero "a largo plazo". El Partido Popular, que aprobó una partida del 0,21 % en los últimos Presupuestos, habla de "evitar duplicidades", pero no de cifras.

Ciudadanos, por su parte, propone una cooperación más eficiente, con una subida progresiva hasta el 0,7 % del PIB, pero en la versión detallada del programa dice que solo "si las condiciones económicas lo permiten".

TRANSGÉNICOS

Tanto el PSOE como el Partido Popular evitan mencionar el asunto explícitamente. Los populares, de todas formas, sí se comprometen a defender "la introducción de avances en biotecnología, evaluados por la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria, que permitan mejoras de productividad y de rendimiento económico".

Ciudadanos, en cambio, asegura que "no se puede permanecer en un pasado inmovilista" y se muestra proclive a adoptar "nuevos retos tecnológicos" como los transgénicos (OMG) o las "nuevas fuentes de proteína", sin especificar si se refiere a los insectos.

Podemos tampoco menciona los transgénicos, pero aboga por criterios de diversificación o sostenibilidad y, al igual que Izquierda Unida, habla de "soberanía alimentaria". El programa de IU sí recoge el derecho de los agricultores a tener "sus propias semillas" y también  la prohibición del uso de transgénicos en la producción de alimentos.

DEMASIADOS OBESOS

Los cuatro partidos coinciden en que hay que combatir la obesidad y el sedentarismo, y proponen planes para promocionar los hábitos saludables. Pero quizás son PSOE y PP quienes abordan el asunto con más detalle porque ambos hablan de llevar la educación por la salud a los colegios. El PSOE propone aplicar la experiencia del tabaco en la lucha contra la obesidad infantil y habla de "limitar el acceso a bebidas azucaradas" o de "controlar legalmente" el uso de la sal.

Los socialistas, de hecho, proponen "fortalecer la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición" para que sea esta la que incorpere "los criterios de salud en la planificación de políticas" relacionadas con los alimentos, la nutrición o las bebidas.

Ciudadanos también se compromete a "implantar un programa de uso responsable de los antibióticos" en las explotaciones ganaderas porque la pérdida de su eficacia puede suponer un riesgo para la salud humana.

TURISMO GASTRONÓMICO

Otro asunto en el que los diferentes partidos parecen coincidir. El Partido Popular plantea una "Estrategia Española de Alimentación, Gastronomía, Cultura y Turismo", y promete planes específicos para "productos turísticos con alto potencial desestacionalizador", como el turismo gastronómico o el enológico, "ligados a experiencias que se puedan disfrutar en todo el territorio nacional y durante todo el año".

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El PSOE reconoce que nuestros chefs han dado a conocer "la marca España a nivel mundial" y quiere hacer del turismo una "prioridad política", pero propone un "cambio de rumbo" y una apuesta por los "productos de mayor valor añadido y capacidad desestacionalizadora". 

Ciudadanos recuerda que "un 12 % de los turistas dice visitarnos por nuestra alimentación y gastronomía" y propone fomentar el relevo generacional en el mundo rural con la "creación de la Agencia para la Promoción del Sector Agroalimentario y el Turismo" porque considera que ligar esos sectores es "una oportunidad desaprovechada".

Podemos e Izquierda Unida le prestan menos atención al asunto y en su documento conjunto de 50 pasos para gobernar juntos, de hecho, ni siquiera lo mencionan. Podemos apuesta por desarrollar un "plan de sostenibilidad del turismo" con un horizonte a 15 años e IU quiere fomentar un "turismo de calidad, sostenible y desestacionalizado".

CONSUMO y TTIP

El Tratado Transatlántico de Comercio e Inversión (TTIP) genera opiniones antagónicas. Algunas organizaciones han alertado de que su aprobación puede favorecer la llegada de los transgénicos o de productos cárnicos tratados con hormonas o desinfectados con cloro.

El Partido Popular se compromete a apoyarlo decididamente porque puede crear "riqueza y nuevas oportunidades a las pymes, estableciendo un mercado libre de barreras arancelarias". Podemos, en cambio, lo considera "una amenaza" porque concibe la regulación social y medioambiental como "obstáculos al comercio".

PSOE y Ciudadanos fijan posiciones intermedias. Los socialistas se proponen velar por que se garanticen los derechos sociales, medioambientales, sanitarios o de seguridad alimentaria, protegiendo la capacidad legislativa de los poderes públicos frente a los "intereses privados". Ciudadanos, por su parte, señala que el TTIP puede ser beneficioso para abaratar las importaciones, pero fija líneas rojas similares a las del PSOE y pide "transparencia" en las negociaciones.

Al margen del TTIP, Podemos propone prohibir el uso del BPA en la fabricación de "cualquier tipo de material que pueda entrar en contacto con alimentos y bebidas", y se compromete a potenciar "un etiquetado ético" que identifique la huella ecológica y social de los productos. Ciudadanos, por su parte, quiere reformar la norma de calidad del cerdo ibérico porque "ha creado confusión entre los consumidores".

AGRICULTURA ECOLÓGICA

Ciudadanos quiere "potenciar la agricultura ecológica, tradicional o alternativa" y el PP propone poner en marcha un "Programa para la Excelencia Alimentaria" en el que la agricultura ecológica tendrá "especial protagonismo", pero no van mucho más allá

Podemos no menciona el asunto, pero IU se compromete a fomentar la agricultura y la ganadería ecológica,  y el PSOE, por su parte, quiere aprobar "un Plan Estratégico de la Agricultura Ecológica" que aborde la producción, el consumo y la internacionalización. Ciudadanos, IU y PSOE hablan también de fomentar el consumo de proximidad (circuitos cortos).

RECICLAJE Y DESPILFARRO

También genera pleno consenso la apuesta por la "economía circular". El Partido Popular habla de fomentar "la reutilización y el reciclado de residuos", valores que aparecen, de forma casi idéntica, en los programa de PSOE, Ciudadanos o Unidos Podemos. Estos últimos, sin embargo, no solo recurren a expresiones voluntaristas, sino que proponen revisar "la transposición de la Directiva Marco de Residuos".

La lucha contra el despilfarro alimentario también aparece en los programas de Ciudadanos o PP. Pero los que más desarrollan este punto son los socialistas, hablando de una "legislación específica" que sirva para "dar un paso más" porque, según detalla el programa, "la situación actual se basa en acuerdos voluntarios entre partes".

INDUSTRIA ALIMENTARIA

El PSOE señala que "el gran atractivo de España" como sede de empresas radica en las infraestruturas, la estabilidad política, el clima o la seguridad, pero también en "la gastronomía". Y sobre la industria agroalimentaria propone "incrementar la dimensión empresarial" para ganar visibilidad e incrementar la capacidad exportadora, pasando del 25 al 40 % de la producción total".

PSOE, PP y Ciudadanos coinciden en señalar que el sector agroalimentario es clave para la economía española, por lo que los populares se comprometen a "seguir desarrollando el Programa Nacional de Innovación e Investigación Agroalimentaria y Forestal".

Ciudadanos, por su parte, propone varias medidas encaminadas a fortalecer la innovación y la internacionalización, como la creación de un observatorio de tendencias globales o "la promoción en el exterior de la cocina española", dado que otros países han "posicionado sus productos agroalimentarios" gracias a medidas de este tipo. Ciudadanos también plantea la "reunificación de los servicios oficiales alimentarios" (salud pública, consumo, etc.) y que una "Alta Inspección" con capacidad auditora emita "informes vinculantes para la financiación autonómica".

El documento de Unidos Podemos no se refiere a la industria alimentaria en particular, pero sí habla de un "nuevo modelo productivo" que permita "desplazar nuestro tejido empresarial hacia ramas de mayor valor añadido", así como "un plan de empleo verde que ayude a desarrollar un sector empresarial sostenible".

DIVERSIDAD Y PATRIMONIO

Podemos, IU, Ciudadanos y PSOE apuestan por mantener y recuperar la diversidad de variedades hortofutícolas y razas ganaderas, y el PP, de forma menos explícita, apuesta por una "agricultura sostenible" que garantice "la diversidad de productos que la sociedad demanda". Pero los únicos que contemplan la riqueza gastronómica desde una perspectiva cultural son los populares, y lo hacen aludiendo a la nueva Ley para la salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial.

AGRICULTURA Y GANADERÍA

El Partido Popular se jacta en su programa de haber logrado, "tras una intensa negociación", un buen acuerdo de financiación en la Política Agraria Común (PAC): "47.000 millones de euros para el periodo 2014-2020", pero el PSOE propone revisar el modelo para aplicar una "política más justa de distribución de ayudas".

El PP promete seguir trabajando para que "la importancia –económica, social y medioambiental– del sector" sea conocida y reconocida, y el PSOE quiere elaborar un "Plan Estatal de Incorporación de Jóvenes a la Agricultura" o a fomentar "políticas activas a favor de la mujer rural".

En relación con la PAC, Ciudadanos propone un "cambio del concepto de ayudas directas por el de beneficios fiscales". También habla del "impulso de proyectos entre la universidad y el sector agrario",  con centros de innovación aplicada operativos, "especializados en áreas de conocimiento" y evitando "que se repliquen por Comunidad Autónoma". 

Ciudadanos también aborda en su programa la crisis del sector lácteo, proponiendo un sistema de márgenes que proteja a los productores, incentivando su agrupación para que puedan negociar "en igualdad de condiciones con el sector industrial y de distribución".

Unidos Podemos también plantea reformas. En concreto, "impulsar una nueva Política Agraria Común basada en la agroecología, la soberanía alimentaria y los bienes comunes, y capaz de defender a los pequeños agricultores, proteger el medio ambiente y poner coto al control de la cadena agroalimentaria por parte de grandes multinacionales".

ACUICULTURA Y PESCA

Las cuatro formaciones aluden a la conciliación de los intereses socioeconómicos y medioambientales. El PSOE propone crear reservas marinas "para proteger nuestro litoral y la actividad pesquera", así como  impulsar "programas de modernización de los barcos".

El programa de Ciudadanos señala además que el "inevitable ajuste del esfuerzo de pesca va a conducir, a medio plazo, a una degradación del nivel de vida de las zonas dependientes de la pesca", por lo que propone "una reconversión de la actividad económica" de las zonas pesqueras y tilda de "crucial" el apoyo al desarrollo de la acuicultura.

El PP también se compromete a impulsar "el crecimiento del sector acuícola" y a fomentar "la sostenibilidad de la actividad pesquera, en particular mediante el apoyo a la innovación tecnológica y a la diversificación de la actividad dentro del sector". Pero los populares insisten también en "ampliar la red de acuerdos pesqueros entre la UE y terceros países, de los que la flota española es la principal beneficiaria".

El programa de Podemos propone abrir un diálogo para "mejorar los criterios de transparencia y gestión en el reparto de cuotas pesqueras" y asegura que primarán los criterios de responsabilidad y sostenibilidad en la producción, así como "los criterios sociales de equidad con quienes viven del mar", abogando por un reparto lineal de las capturas.