Gourmets por dentro y por fuera

Madrid

Los miles de productos que cada año se presentan en el Salón de Gourmets sirven para detectar (o corroborar) tendencias. En el último lustro, por ejemplo, se ha pasado del boom de la cerveza artesana al interés por todo lo relacionado con la salud: productos ecológicos, superalimentos... La crisis hizo que muchas empresas miraran hacia fuera y que otras le confiaran su imagen a alguno de los cocineros que estaban saliendo por la tele. También se ha notado un gran avance en el sector de los precocinados (cuarta y quinta gama) y mucha más oferta de artículos aptos para veganos, celiacos o intolerantes a la lactosa. Pero si algo está cambiando, más allá del producto en sí —que era bueno y lo sigue siendo— es su envoltorio.

Ampliar

Hasta hace poco, las empresas que apostaban por etiquetas de diseño o por envases especialmente cuidados solían destacar. Ahora, por lo visto en la edición número 32 de la feria madrileña, las que destacan son las que no lo hacen.

Un buen ejemplo es el sector del aceite de oliva, que de unos años a esta parte no solo ha empezado a presumir de propiedades saludables o a apostar por la cosecha temprana sino que ha puesto en marcha una auténtica revolución en el diseño de los envases: botellas de colores, frascos que recuerdan a los perfumes caros...

Lola Sagra, de la empresa jienense Nobleza del Sur, ha dado un paso más allá con el aceite de oliva virgen extra Only For Children [solo para niños], un blend de arbequina y picual que ella describe como "un frutado muy intenso, muy redondo y muy agradable" que resulta "ideal para las primeras papillas" y que, en realidad, puede consumir cualquier adulto, claro. Pero gracias a esa pretendida exclusividad y a las ilustraciones de Isabel Cabello, su producto destaca entre la multitud.

Ampliar

Otro buen ejemplo de excelencia en materia de diseño es el de la empresa bilbaína Young and Beautifood, que se surte de proveedores de gran producto (cortezas, chocolate, nubes o pasta, por ejemplo) para luego envasar de forma magistral.

También hay quien opta —literalmente— por la transperencia, como la conservera almeriense La Receta, que solo usa botes de cristal para envasar pulpo, cañaíllas, salsa de almendra, paella o preparados de tortilla de patata. "Queremos que te comas lo que ves y eso nos da una imagen diferente, pero es que además no nos gusta el sabor de la conserva en lata", explica Manolo Herrera.

La empresa segoviana QBET (acrónimo de "¡qué bueno está todo!") también se preocupa mucho del diseño y recurre los envases de cristal, pero no en exclusiva. Paula Arroyo, del departamento comercial, detalla que su apuesta se basa, sobre todo, en ofrecer de forma asequible y muy sencilla un producto tan exclusivo —porque la producción es escasa— como el judión de La Granja. Y al Salón de Gourmets han acudido con varias opciones apetecibles (para calentar y listo): la receta tradicional y también los judiones con boletus del chef Rubén Arnanz.

Ampliar

También sigue aumentando la variedad de alternativas veganas. La empresa jerezana Charcuterra produce una morcilla vegetal exquisita y la valenciana Wise Nature ha transformado las semillas de chía en un interesante Chiaviar. Pero una cosa no quita la otraa: cada vez más gente renuncia a comer carne y, mientras tanto, hay quien se lanza a criar vacas Black Angus en Teruel (Delicater) o quien apuesta fuerte por las hamburguesas, incluso con el aval de La Roja.

Novedades líquidas

Otro buen ejemplo de oportunismo marketiniano es el de la empresa sevillana que comercializa el licor Fuego Valyrio, un destilado de receta secreta y color verde que no dispone de licencia oficial de Juego de Tronos, pero sí de una extraordinaria visión comercial porque es muy posible que esta bebida de 33 grados pasase totalmente desapercibida en una cata a ciegas, pero gracias a su poder evocador ha conseguido colocarse en el top de Amazon y que ahora, presentándose en el Salón de Gourmets, busca llegar a más público a través de la distribución convencional.

La última gama de licores de la empresa gallega Habelas Hailas, en cambio, llama la atención tanto por su contenido (¡acaban de sacar un licor de pimientos picantes!) como por el continente, diseñado por el viñetista del Faro de Vigo Luis Davila.

También han irrumpido con fuerza dos nuevas marcas de agua que se distinguen, sobre todo, por su envase: la malagueña LY Company y la soriana Agua EnCaja Mejor. Dos proyectos que apuestan por un material mucho más sostenible que el plástico, que conserva mejor el frío y que permite personalizar. "El Museo Thyssen nos pidió convertir cuatro de sus cuadros en briks de agua y es de lo que más se vende en su tienda", señala Francisco Rodríguez, de LY Company.

Ampliar

Entre los productos más curiosos de este Salón de Gourmets hay un pan de molde hecho con aguacate (en vez de mantequilla) y un queso elaborado según una receta encontrada en un texto del siglo I, pero quizá nada llame tanto la atención como la cerveza Puente Nuevo, "la única del mundo que hace la segunda fermentación bajo el mar". Concretamente, a unos 20 metros de profundidad, en una parcela submarina de Estepona cedida por un criador de zamburiñas.

Su creadora, la microbióloga Jenny Heredia, concede que el hecho de vender la botella llena de caracolas adheridas al vidrio —como si fuera el ánfora de un barco pirata hundido hace cientos de años— funciona a la perfección como gancho comercial, pero también explica que la temperatura constante de 16 grados resulta ideal para el producto. El precio de cada botella de 75 cl supera los 100 euros, pero primer lote ya estaba vendido (en Alemania) antes incluso de salir a flote.