Draghi defiende la austeridad
El BCE mantiene el precio del dinero en mínimos históricos del 0,75% y prevé que la inflación caiga en la eurozona por debajo del 2% durante este año
El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, sigue apostando por la austeridad como único camino posible. En su primera comparecencia del año, asegura que sería un error retroceder hacia una situación que se demostró insostenible. "Esta consolidación fiscal es inevitable. Sabemos que tendrá efectos de contracción a corto plazo, pero ahora que se ha hecho tanto en este sentido, creo que no está bien dar marcha atrás", aseguró Draghi.
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En su primera reunión del año, el Banco Central Europeo ha decidido mantener el precio del dinero en mínimos históricos del 0,75%. La decisión ha sido tomada por unanimidad, según ha confirmado Mario Draghi al ser preguntado de forma insistente por los periodistas. Esta ha sido una cuestión que se ha repetido a lo largo de la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno del BCE, ya que en el último encuentro se había evidenciado la diversidad de pareceres entre los banqueros y se especula con una posible rebaja de tipos en el primer trimestre.
También hubo referencias a los bancos en su discurso. La autoridad monetaria europea considera imprescindible que las entidades financieras se sigan fortaleciendo. De hecho, Mario Draghi ha calificado de "crucial" para el sistema bancario el futuro supervisor europeo aunque sin olvidarse de las entidades de supervisión nacional. En este sentido, el presidente del BCE ha precisado que "una parte positiva de la crisis es que los supervisores nacionales se han vuelto más activos".
Por otra parte, Draghi ha enumerado las mejoras que el BCE ha observado en los mercados, tales como depósitos al alza o volatilidad a la baja, aunque ha alertado que, pese a señales de una mayor estabilidad, todavía se detecta cierta fragmentación en la economía.
En este horizonte de incertidumbres elevadas, Draghi ha situado la recuperación económica de la eurozona a finales de 2013 mientras que prevé que la inflación caiga por debajo del 2% durante este año. "No existen presiones inflacionistas", ha concluido el presidente del BCE.
En relación al papel de los gobiernos, dijo que deberían aplicar "rápidamente" más reformas estructurales para mejorar sus niveles de competitividad.
