El delito y el pecado

Madrid

El delito y el pecado. Casi todo resulta opacado hoy por las estremecedoras declaraciones del escritor Alejandro Palomas, de 54 años, denunciando sin reserva mental alguna haber sido víctima de abusos sexuales cuando era niño por parte de un miembro de la Iglesia Católica. En realidad, Palomas solo ha sido el último hasta ahora en poner cara y sentimientos a un escándalo que está entre nosotros desde hace bastante tiempo y que va traspasando una frontera tras otra. El de los casos de pederastia protagonizados por sacerdotes, algunos de ellos de rango superior. Todavía hace unos días, el anterior Papa Benedicto XVI ha sido acusado de encubrir a algunos clérigos teniendo conocimiento de sus actos. El diario 'El País' entregó el Papa Francisco I a la Comisión Episcopal Española su investigación sobre 251 casos de pederastia ocurridos en España. Cualquier organización de cualquier naturaleza que tenga bajo su jerarquía a personas acusadas de delitos tan monstruosos, ha de tomar medidas inmediatas y, sin embargo, esto va a cámara lenta. Por ello es tan importante que se cree una comisión de investigación en el Parlamento. Se ha acabado el silencio. Huele a azufre.