Y si Rusia corta la llave del gas a Europa....
El temor del norte de Europa a sufrir escasez en el suministro de gas, está detrás de muchos del os movimientos diplomáticos que se multiplican con Rusia para rebajar la tensión existente. Pero si Rusia cierra el grifo ¿Qué opciones quedan? Muchas y variadas, al menos para cubrir necesidades, aunque no para almacenar producto
Y si Rusia corta la llave del gas a Europa....
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Madrid
El miedo a que la tensión política y militar entre Rusia y Occidente lleve a provocar una escasez en el suministro de gas en Europa, le quita el sueño a muchos países, sobre todo el norte del Viejo Continente. Si tenemos en cuenta que Rusia es el mayor proveedor de gas de Europa y que la mayoría de ese gas nos llega vía los conductos que pasan por Ucrania (gaseoductos), pues el temor no está demás. El año 2021, los flujos de gas rusos han descendido un cuarto respecto al año anterior, Es Martin Hankar, especialista en análisis energéticos explicando los datos a los alumnos del Kings College de Londres: "Rusia podría tranquilamente incrementar al menos un 15% su ministro de gas a Europa. Si no lo hace es porque no quiere".
Si se produce una invasión rusa de Ucrania, la catástrofe energética se hará realidad reduciéndose aún más esas llegadas de gas. Putin asegura que es una idiotez decir que Rusia va a cortar el suministro energético y añade :"No solo es una idiotez, es que va en contra de nuestros propios intereses. Y francamente, ni en los peores momentos hemos dejado de cumplir nuestros compromisos adquiridos en esa materia".
Desde Estados Unidos dicen que tienen medios y recursos suficientes para garantizar el suministro a Europa. Suministro suficiente para pasar el invierno y la primavera, negociando con países productores directamente que hagan llegar el gas en camiones cisterna a Europa. Pero ¿de dónde vendría ese gas? Pues Estados Unidos no da muchos detalles, pero la ecuación es de aritmética clara. El mayor productor de gas licuado del mundo es Australia. Llegó a ostentar ese título hace tres años, desbancando a Qatar. Exporta 81 millones de toneladas de gas licuado en el año 2020 a todo el mundo, y los principales beneficiados de ese gas, son Japón con un 35% y Corea del Sur con un 11%.
El resto en menor medida va para países limítrofes, islas del pacífico, e incluso la India. Traer el gas licuado desde Australia hasta el Viejo Continente, va a subir un pico el precio final, pero como parece que dinero para pagarlo hay, pues de ahí vendría una parte del suministro si Rusia cierra su grifo. Y Rusia quiere cerrar el suministro que manda por Ucrania y poner en marcha el nuevo conducto North Stream 2, y escuchen lo que dice uno de los mayores especialistas en producción energética mundial Mihail Krutikhim : "Gazprom puede suministrar más gas.... pero dice que solo lo hará si Europa acepta los términos de Rusia sobre North Stream 2. es pura y llanamente chantaje".
Otra parte llegaría de Qatar, que como les hemos dicho, es el segundo productor mundial de gas licuado, justo por detrás de Australia. Qatar es el mayor aliado que tiene occidente en Oriente Medio. Suministra el deseado líquido gaseoso al Reino Unido, compensa las faltas de otros países europeos, Francia o Austria e incluso Italia. A España ha llegado alguna de sus exportaciones también. Desde Estados Unidos Jack Sullivan, que es el asesor de Biden en materia energética echaba mas leña al fuego: "Estamos preocupados de que Rusia use su energía gasística como arma de coherción o arma política, lo hemos visto antes y podemos verlo de nuevo".
Y luego estaría Libia. Sería el último objetivo, porque allí hay un sin gobierno donde no hay un liderazgo claro, habría que negociar con grupos paramilitares que controlan las zonas donde están los gaseoductos, y pagarles un dinero que podría servir para provocar otra guerra civil, pero llegado el caso, Europa y también Estados Unidos cerraran los ojos al problema y lo considerarán un mal menor.
Normalmente los países suelen acumular gas suficiente al principio del invierno para no pasar carencias. Es lo que se llaman reservas. Rusia manda 230 millones de metros cúbicos de gas a Europa todos los días. De esa cantidad unos 80 millones viene por los gaseoductos ucranianos. El nuevo gaseoducto que tiene operativo, podría duplicar esa cantidad de metros cúbicos y llegar al doble de la población Europea.
Victoria García
En la SER, desde hace casi tres décadas, con algunas ausencias. Antes en Antena3 Radio y TV. Trabajé...