El bolígrafo biodegradable en el mar

San Sebastián de los Reyes

Las empresas buscan tener visibilidad y que su marca esté presente en todos los objetos que puedan ser susceptibles de llevarse uno consigo, de moverse y de tener presencia como parte de su imagen corporativa. Hablamos de los objetos promocionales o merchandising, esos pequeños regalos que nos dan como si fueran gratuitos, como si no costaran nada, pero que tienen un gran impacto ambiental ya que muchos de ellos los cogemos y en poco tiempo acaban olvidados en un cajón y luego acaban en cualquier sitio.

Para dar valor a estos obsequios hay que darles un plus de sostenibilidad y de calidad, de cariño en el producto y un valor añadido. Es lo que ofrecen empresas como Prodir, fabricante del primer bolígrafo con carcasas sostenibles hechas de biopolímeros (PHA). El secreto, una materia prima natural que ha sido sintetizada y descompuesta por microorganismos durante millones de años. Compuesta de base biológica, forma parte del ciclo de la naturaleza, es biocompatible, biodegradable.

Además de las ventajas de la biodegradabilidad en entornos naturales como el mar, el agua dulce y la tierra, los biopolímeros también resuelven problemas que surgen en el cultivo y el uso de bioplásticos tradicionales.

Así, para su fabricación no se quitan tierras a la industria alimentaria, no se generan fertilizantes que contaminan las aguas subterráneas, el consumo de agua es nulo y no se producen emisiones de partículas finas. Está diseñado para tener una larga vida útil y viene equipado de serie con una mina punta sin plomo que, una vez usadas, se pueden sustituir.

Hablamos de este tema con Sonia Greño Responsable comercial de Prodir para España y Portugal, y con Antonio Quilis, director de El Mundo Ecológico.

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