¿Crisis?, calma, está Rubi

Si hay una persona a la que no le viene nada grande la situación de la UD Almería es Joan Francesc Ferrer Sicilia, Rubi. El entrenador rojiblanco, bien curtido en batalla deportiva en Primera y Segunda, sabe que la dinámica rojiblanca va a terminar pronto porque ha visto brotes parecidos a los de su último ascenso con el Huesca en 2018.

Con un punto de quince en el casillero, el equipo ha sido el peor de la categoría en el mes de enero, provocando que Eibar y Valladolid se encaramen a lo más alto con un +12 en el balance respecto a los almerienses. El choque con el Ibiza se ha marcado en el calendario para salir cuanto antes de la crisis.

El ejemploEl 11 de febrero de 2018 el Huesca parecía haber puesto la directa a Primera. Había encadenado cinco victorias consecutivas para ser líder con 55 puntos, once por delante del tercer clasificado, el Rayo Vallecano. Sin embargo, el 1-0 frente a la Cultural Leonesa fue la última alegría en mucho tiempo para los azulgrana.

Arrancaron una racha de ¡8 partidos! sin vencer repartidos en cuatro empates: Almería, Reus Deportivo, Cádiz y Albacete Balompié, más otras tantas derrotas: Real Valladolid, Rayo Vallecano, Sporting y Real Zaragoza. El profundo bache de marcadores se cortó en El Alcoraz el 16 de abril, venciendo al Barcelona B. A partir de entonces el Huesca recuperó la velocidad de crucero y sumó otros tres triunfos más para terminar de asegurar su plaza de ascenso directo. Solo perdería en las dos últimas jornadas ya con el objetivo cumplido. Hubo nervios en Huesca porque parecía que se podía escapar una plaza, pero la misma plantilla que había conseguido mandar en la categoría volvió a tiempo.

Girona y ValladolidNo tuvo una racha tan negativa en sus dos experiencias anteriores en la Liga de plata. Con el club catalán la peor dinámica fueron tres jornadas sin ganar: empate con el Barça B y derrotas contra Almería y Sabadell. En Pucela fueron cuatro, con empates ante Mirandés y Sabadell, más los tropiezos contra Las Palmas y Leganés.

Fue el propio Rubi quien reconoció en rueda de prensa que ve muchas similitudes entre aquel Huesca que salió del pozo y el Almería actual, “aunque ahora hay mucho más margen porque vamos a iniciar febrero. Club, staff, plantilla y afición vamos en el mismo camino y eso me gusta, haciendo una crítica constructiva con los malos resultados”. Precisamente la directiva apostó fuerte por Rubi firmando un contrato hasta 2023, algo poco habitual hasta la fecha desde la llegada de Turki Al-Sheikh.

Siempre arribaCon mayor o menor éxito, el catalán siempre ha acabado las temporadas entre los seis mejores de la competición, por lo que busca el segundo ascenso a Primera sentado en el banquillo del Almería. El regreso de Umar Sadiq después de su participación en la Copa África y la recuperación de efectivos tras lesiones siempre es una buena noticia y un empujón para escapar de la crisis.