El PP sostuvo la tesis del error informático en la votación de la reforma laboral cuando varios diputados ya sabían que era un error humano de Alberto Casero
"Lo estoy pasando fatal, estoy destrozado, la que he liado", confesó a varios compañeros de partido en el Congreso
Madrid
Fue el pasado jueves cuando Alberto Casero, diputado del PP, votó por error a favor de la Reforma Laboral propuesta por el Gobierno. Según 'El País', los populares apoyaron el argumento del error informático cuando varios de los diputados ya sabían que el error lo había cometido Casero, quien se equivocó votando.
Tras cometer el error humano al votar telemáticamente desde su casa, el popular intentó enmendarlo presencialmente en el Congreso. Pero el voto telemático, que tuvo que ratificar antes de ser definitivo, no se puede modificar. Tras la aprobación en el hemiciclo, en la que el PSOE consiguió sacar adelante la reforma laboral, Casero se acercó a varios compañeros y les dijo: "Lo estoy pasando fatal, estoy destrozado, la que he liado", admitiendo que el error iba de su mano.
Después, todo el partido defendió la idea de que se había producido un fallo informático que había distorsionado la votación. Además. Casero terminó enviando un escrito a Meritxell Batet, la presidenta del Congreso, en el que se sumó a esta tesis, rechazando que se hubiese equivocado emitiendo sus votos.
En las actas de votación, donde se puede comprobar uno a uno el sentido de voto de cada diputado, han corroborado que el diputado popular no solo se ha equivocado apoyando la reforma laboral, sino que también votó en contra de una moción del PP, que se debatió ayer y con la que el Partido Popular buscaba reprobar al Gobierno por su manera de legislar. En el resto de las 17 votaciones que había este jueves sí votó correctamente.
Una reforma laboral aprobada de chiripa
La primera sorpresa en la votación llegó de la mano de dos diputados de UPN, Sergio Sayas y Carlos García Adanero, quienes votaron finalmente en contra, rompiendo la disciplina de partido. Pero fue el error de Alberto Casero el que otorgó el voto 175 para conseguir la aprobación de la reforma. Los votos de Ciudadanos, PDeCat, Más País, Compromís, Coalición Canaria, Nueva Canarias, Teruel Existe y PRC suman, junto al PSOE y Unidas Podemos, 174 votos, por lo que fueron necesarios los votos de UPN para sacar adelante la votación.
Fue tal el lío con los votos que hasta la propia Meritxell Batet llegó a decir que la reforma había sido derogada, lo que arrancó los aplausos de la derecha, sobre todo en la bancada popular. Segundos más tarde, los servicios jurídicos de la Cámara aclararon que la votación sí había salido adelante, lo que provocó el ya conocido abrazo en la bancada del Gobierno.