Cuerda

“Sentada junto a la carretera, contemplando el carro que sube la cuesta hacia donde está ella, Lena piensa: vengo de Alabama: buena caminata. Todo el camino, desde Alabama, a patita: buena caminata” … Esto es un párrafo de Luz de Agosto de William Faulkner con el que nuestro paisano José Luis Cuerda inicia su particular memorabilia de Amanece que no es poco, el libro, otra suerte de aventura que Cuerda aborda con más desparpajo si cabe que la propia película. José Luis Cuerda está otra vez con nosotros. Cuerda es de esas personas que nunca se ha ido, aunque sus funerales aún nos retumban en nuestros entresijos afectuosos en el amargo recuerdo de hace dos años. Siguen sonando en Albacete pues los madrigales cada día que amanece, que no es poco, en estas horas de ventisca pandémica … Y el veterano director cinematográfico de la ciudad vuelve a visitarnos desde el Museo Municipal, por cierto, como una especie de pícaro guiño a los incondicionales de la cultura general desprovistos desde hace meses de tan emblemático y esplendido escenario. Y es que con Cuerda vuelve el espectáculo: la orgullosa historia de un albaceteño que colocó Albacete en el mapa universal de los afectos y reconocimientos. Sobre todo, cuando estrenó La Lengua de las Mariposas, uno de los documentos más brillantes de la historia del cine español. El maestro ha vuelto en una formidable exposición de su vida y obra impulsada por Jesús López, director de la Filmoteca de Albacete que ha sabido manejar toda la documentación que coleccionó en muchos casos junto al propio protagonista que en sus últimos años entre los vivos dio el visto bueno a la donación. Jesús López cuenta que reunió una veintena de cajas repletas de fotografías, guiones, claquetas, películas (caseras, profesionales) y objetos personales que el mismo José Luis Cuerda ayudó a catalogar un caluroso mes de julio de 2007 incrementando su personal tesoro cada visita que hacía a Albacete desde entonces. Y ahora en el Museo Municipal, hasta el 27 de febrero, está todo el legado Cuerda… los personajes que le acompañaron en su fantástica aventura vital, los actores nacionales entre los que no faltan Fernando Fernán Gómez, el más grande, Paco Rabal o aquellos increíbles secundarios, episódicos, Luis Cijes, el makinavaja Pepe Rubianes y en general todo el elenco conocido de la interpretación nacional: ¡todo!. También aquel incondicional amigo desde la niñez albaceteña, el inolvidable crítico cinematográfico, José Antonio Tendero, que tuvo que leer el discurso de la presentación nacional de la película Amanece que no es poco en el cine Gran Hotel de Albacete porque al pobre Cuerda le había llegado por sorpresa una inoportuna indigestión de ostras…, otra vez el constante juego de la lírica delirante rodeando al creador de fantasías. En el Museo Municipal está el todo Cuerda estos días. Absolutamente recomendable porque significa una interesante parcela de nuestro cine nacional. O también, porque como diría otro de los iconos del director, el gran Alberto Bové el de la Calabaza: José Luis Cuerda… todos te llevamos en el corazón!