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Incremento de intentos suicidas de adolescentes en Aragón: "Todo empezó en el confinamiento, me sentía solo, cada vez más de bajón"

El Departamento de Educación ha detectado 16 casos de riesgo graves y es la segunda causa de muerte en los adolescentes. Aragón ha puesto en marcha una estrategia contra el suicido en los centros escolares para detectarlo y prevenirlo

Reflejo de una mujer joven en un espejo roto / Rafael Elias

Reflejo de una mujer joven en un espejo roto

Zaragoza

"Todo empezó en el confinamiento; dejé el contacto con todo el mundo y me empecé a sentir muy solo; me encerré en mí, empecé a tomar conductas inadecuadas con la alimentación y, a partir de ahí, me fui encontrando cada vez peor, cada vez más de bajón, me empecé a aislar de todo el mundo y a tener pensamientos más fuertes". Es Daniel. Su pesadilla empezó con el confinamiento. Forma parte de la demoledora estadística que alerta de un incremento del 47 % de casos de intentos suicidas en chicos de 15 a 18 años.

En Departamento de Educación del Gobierno de Aragón ha detectado 16 casos de riesgo grave. Es la segunda causa de muerte y detrás de muchos ellos están los trastornos de la conducta alimentaria. Aragón quiere poner voz y hablar de lo que hasta ahora era tratado como tabú, las autolesiones e intentos de suicido en los jóvenes.

Conductas impulsivas y perfeccionismo

Su incremento hace cada vez más difícil su detección, sobre todo porque detrás no hay un trastorno o enfermedad mental, es una conducta "impulsiva", que sería "el perfil del cerebro en desarrollo del adolescente, y su lóbulo frontal está todavía muy inmaduro - que sería su policía - y no le dice que eso no lo debe hacer porque las consecuencias serían nefastas", explica Ana Calvo, psiquiatra infanto-juvenil.

La pandemia ha marcado un antes y un después, pero también hay situaciones que desencadenan estas conductas. Susana tiene 17 años y ha sufrido 3 intentos suicidas. "Cuando tenía 12 años o así; siempre he sido la gordita de clase, siempre he tenido un aspecto físico bastante voluminoso y yo no me daba cuenta de eso hasta que llegué a 1º de la ESO", relata. "Mis padres han sido mi fuente de apoyo más grande, junto a algún amigo".

Daniel tiene 16 años. "De repente, empecé a querer ser perfecto en todo, más allá de lo académico y en la cuarentena, al estar más solo y tener vía libre para hacer lo que yo quisiera, empecé a obsesionarme con mi cuerpo y conmigo mismo, con conductas raras con la comida y, a partir de ahí, me empecé a encontrar mal".

Soledad, ansiedad y ataques de pánico

Susana se ha recuperado y ha salido con fuerza de las situaciones más duras. "Incluso cuando tienes ataques de pánico, te dan intentos suicidas, que es lo que me pasó en las dos ocasiones". Explica que "hubo situaciones que me sobrepasaron el límite de lo que yo podía gestionar y me dio un ataque de pánico e intentos de suicidio" y después "te dan más ataques de pánico, incluso es parecido a un ataque epiléptico" porque "te dan como convulsiones".

¿Qué desencadena estas situaciones? Explica Ana Calvo que "en la adolescencia, es un estado de estrés en el que a uno le aparece una imagen corporal que no está de acuerdo con ella, ha dejado el 'caparazón de la gambita', que es el protector de los padres y empieza a pensar quién es, qué quiere ser, lo ve todo más difícil, lo ve negro".

Y todo se ha agravado con la pandemia: "Han aumentado los trastornos depresivos hasta un 30 % en los dos últimos años y todo estos se agrava muchísimo más". Añade que "les faltan estrategias, tienen más sentimientos de ansiedad, de soledad, de incapacidad de salir de sus problemas y más dificultad para relacionarse con sus iguales", continúa Calvo.

Protocolo en las aulas

En las aulas, ya se ha desarrollado un protocolo para detectar casos como estos y se está formando a los docentes. Es importante, dice la directora general de Planificación Educativa, Ana Montagud, escuchar a quien afronta esta situación y no restarle importancia. "Nos encontramos ante una persona que tiene un problema interno, que le está llevando ante una situación al límite". Por eso, insiste, "quitarle importancia no siempre tiene efectos positivos".

Daniel y Susana lo han superado

"Yo quiero lanzar un mensaje de esperanza y decirles a todas las personas que estén pasando por un TCA que son muy fuertes y que en algún momento todo esto pasará", afirma Susana. Daniel recomienda "pedir ayuda cuanto antes".

 
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