Salva Ballesta, la peor apuesta del UCAM Murcia

Murcia

Cuando el UCAM Murcia CF tomó la decisión de destituir a José María Salmerón por los resultados del equipo, toda persona de fútbol lo entendió. Doce puntos en once partidos es cifra más que suficiente para pasar por la guillotina a cualquier técnico. Aunque le hicieras el equipo a medida, aunque fuera el hombre con el que casi consigues ascender -otra vez- al fútbol profesional.

Fue una decisión dolorosa porque Salmerón era un hombre de club. Hacía su trabajo sin molestar a nadie. Pero el cambio tenía que producirse porque el equipo no competía al nivel de la categoría. Porque si tu objetivo es meterte en el playoff por el ascenso a LaLiga SmartBank y estás coqueteando con los puestos de descenso, hay que dar un golpe encima de la mesa para darle la vuelta a la situación antes de que se complique más de la cuenta.

Y el golpe de Pedro Reverte, con la influencia fundamental del presidente, fue firmar a Salva Ballesta. Entrenador con poca experiencia, pese a sus logros con el Algeciras, que lejos de revertir la dinámica, ha empeorado los números de Salmerón. Con los mismos partidos, un punto menos. A punto por partido. Con los mismos goles anotados pero dos más encajados. Y el equipo ya no está coqueteando con el descenso, está instalado en la zona roja a cuatro puntos de la salvación, distancia que puede ser mayor ya que tanto Sabadell como Atlético Sanluqueño tienen un partido pendiente.

Pidió tiempo tras el cambio, con balones fuera, plantilla nueva y sin cambios visibles en el juego y casillero. Pero el problema de Ballesta no solo son los números o el fútbol del equipo, que es peor que con Salmerón. Es que desde su llegada impuso un régimen dictatorial con los jugadores, con los empleados del club y con la prensa. Con salidas de tono públicas, con menosprecios y demostrando que pilota el avión. Mal. Pero bajo su mando.

A eso hay que añadir la imagen del UCAM Murcia CF. Que no solo pierde por esa mala conducta del técnico, es que en actos como en la presentación del derbi benéfico contra el Real Murcia, pasó de adecuarse tras el entrenamiento para aparecer en la foto oficial con el pantalón corto del entreno. Acude a las ruedas de prensa sin la indumentaria del club, algo que no hace gracia en la Universidad Católica que tan bien trabaja el marketing, especialmente en lo deportivo. Una mala apuesta que, hoy, sigue manteniendo el club del BeSoccer La Condomina, pero mirando el encuentro ante el Real Madrid Castilla de este viernes a las 21:00.

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