Soto del Real y Colmenar Viejo rechazan el macroproyecto fotovoltaico “que impactaría visual y medioambientalmente en la zona"

Soto del Real

El Ayuntamiento de Soto del Real ha presentado alegaciones al proyecto fotovoltaico de 99,99MW presentado por una importante empresa de energías renovables bajo la denominación de ‘Mandarín’. A su rechazo al proyecto se han sumado investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid o del Museo de Ciencias Naturales, o partidos políticos como Ganemos Colmenar.

La planta se situaría en el término municipal de Soto del Real pero a escasos 1.400 metros de la Ermita de Nuestra Señora de los Remedios de Colmenar Viejo. Además del impacto visual que supondría en esta zona, la línea de Alta Tensión que transportaría la energía generada atravesaría otras zonas protegidas como la Dehesa de Navalvillar.

El concejal de Urbanismo y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Soto del Real, Javier Benayas ha explicado que el Estudio de Impacto Ambiental del proyecto tiene muchas deficiencias y ha recordado que todo el término municipal de Soto es Reserva de la Biosfera. Al ser una instalación de más de 50MW será el Gobierno de España quién tendrá que aprobar este estudio, si fuera así, explica Benayas, la competencia pasaría a la Comunidad de Madrid.

Los terrenos donde esta empresa ha proyectado la planta es un terreno ganadero especialmente protegido y sería el gobierno regional el encargado de hacer una reclasificación del suelo, de protegido a zona industrial de uso fotovoltaico. Si la empresa consiguiera superar estos dos trámites aún necesitaría que el Ayuntamiento de Soto del Real la declarará como Instalación de Interés Público, algo que, afirma Benayas, no harán. El concejal de Urbanismo teme que la Ley Ómnibus que está tramitando la Comunidad de Madrid quite al ayuntamiento esta posibilidad de parar el proyecto.

Desde el municipio vecino de Colmenar Viejo, ha sido Ganemos Colmenar quién ha anunciado que ha presentado alegaciones a este proyecto. Considera que además del impacto visual que supondría para la Ermita de los Remedios, en esa zona hubo una importante presencia visigoda y por tanto yacimientos arqueológicos que podrían ahora ser destruidos o deteriorados.

Ganemos Colmenar cree que el proyecto incumple las leyes del sector energético y ha explicado que la línea de Alta Tensión que transportaría la energía generada en la planta pasaría por otro enclave natural y cultural de Colmenar Viejo; la Dehesa de Navalvillar. Denuncian el impacto de estas torres de alta tensión atravesando una zona de gran biodiversidad.

Ganemos Colmenar ha explicado que están completamente a favor de una transición energética hacia las energías renovables, pero que su desarrollo tiene que ser compatible con la conservación de la biodiversidad, la protección del paisaje y el respeto al patrimonio social, cultural, arqueológico e histórico.