Fekir frente a lo rutinario
El bético ha desterrado su pasado para instalarse en el esplendor de su zurda
El debate se ha abierto en 'Carrusel Deportivo' de la mano de Dani Garrido. ¿Es Nabil Fekir uno de los cinco mejores jugadores de LaLiga? ¿O es ya el mejor? La respuesta responde al gusto personal. Pero del mismo modo que el criterio no será colectivo, el franco-argelino hace méritos para que así sea. El Betis se ha instalado en la rutina de los tres días. Tres días entre partidos, menos de tres para preparar el siguiente. Y en el hábito que exige el calendario, Fekir también se ha convertido en un jugador rutinario. Hace tiempo que dejó de ser el talento figurado en la irregularidad, aunque haya sido esta temporada cuando ha naturalizado su gracia. Fekir se ha empeñado en hacernos creer que su juego es ordinario, que obedece al día a día. Nada más lejos de la realidad, lo del galo es extraordinario.
El Betis asaltó el Ciudad de Valencia. 2-4 auspiciado por el doblete de su jugador esfera. Esfera porque alrededor de él se desarrolla el mecanismo del 'Ingeniero'. Manuel Pellegrini ha construido un equipo todoterreno en contextos, escenarios y momentos. Disfruta de los partidos, se adapta a ellos y desde su complementariedad colectiva es capaz de superar los obstáculos. Pero eso no basta para alcanzar la competitividad de la élite. Se necesita un elemento disruptor, que desequilibre al tiempo que lidere, que acelere y que frene, que alimente al resto mientras sacia su propio apetito.
Pellegrini descubrió la trampa en una lámpara. De ella salió un genio acostumbrado a volver a su cobijo. Pero esta temporada, el genio no se ha reducido a cumplir los tres deseos del Betis. Ahora Fekir cumple los deseos de Heliópolis cada tres días. Se calza las botas, se enfunda la verdiblanca y pisa el verde dispuesto a que el espectador siga alojado en la ilusión de su zurda. De ella surgen su desvergonzado regate, las parábolas de su goleo, la sensibilidad de sus toques y la fluidez de sus movimientos. Pero Fekir siempre ha guardado en él una calidad apabullante. Su condicionante estaba en su mente, a la que ha moldeado hasta liberarla en el día a día. Sin ella no interconectaría el engranaje que le rodea, no se haría dueño y señor de los espacios, ni crearía en cada partido una obra distinta a la anterior. Él tenía su llave, pero necesitaba del calor del Villamarín para localizarla.
¿Y por qué Fekir es uno de los 5 mejores jugadores de LaLiga? Porque su magia se ha encontrado con la motivación. Y de ese choque ha nacido una determinación desmedida. Ahora es uno de los futbolistas más diferenciales y a su vez determinantes del campeonato. Los datos certifican lo que las sensaciones antes manifestaban. Tras su doblete frente al Levante, el mediapunta está disfrutando de su mejor temporada a nivel individual con 12 contribuciones directas en goles, con seis goles y seis asistencias según Opta.
Los cantos de sirena han llegado al Camp Nou y aunque la lámpara la tiene Pellegrini hasta 2026, será el genio quien dictamine su futuro, del mismo modo que quiso alterar su presente y el del propio Betis disfrazando lo extraordinario en algo rutinario.
Juan Antonio Requena
Estudiante de periodismo. Antes en Diario AS. Ahora aprendiendo en SER Deportes