Alerta roja en el Parque de los Príncipes

PSG y Real Madrid se juegan media temporada en París. O al menos la mitad de esa media temporada, ya que no conviene olvidar que la vuelta en el Bernabéu el próximo 9 de marzo se antoja decisiva para la eliminatoria.

En si esta noche el Real Madrid mira de reojo o no a ese partido reside una de las grandes incógnitas de la cita. Por un lado, Ancelotti deberá decidir si arriesga con Benzema desde el principio o si es más conservador y le reserva unos minutos en la segunda parte. Por otro, Mendy y Casemiro habrán de dirimir el riesgo que asumen en el partido. Y es que ambos están percibidos de amonestación. Si ven la tarjeta amarilla en París, serán baja para la vuelta de la eliminatoria en Madrid.

Son clave

La importancia de ambos es manifiesta. Desde su primera etapa en Madrid, Ancelotti resalta una palabra sobre las demás cuando es preguntado por cuestiones tácticas: "equilibrio". Casemiro es el equilibrio de este equipo. Es el tercero en discordia, la pieza más infravalorada de uno de los mejores medios del campo de la historia del fútbol. Esta temporada solo se ha perdido tres partidos, pero las tendencias del Madrid sin él las pasadas temporadas atestiguan la necesidad del paulista.

Pudo forzar la tarjeta ante el Sheriff, en el quinto partido de la fase de grupos. Se habría perdido el partido final ante el Inter, en el que estaba en juego el primer puesto, pero habría llegado limpio a la fase final. Sin embargo, tras una conversación con Ancelotti, decidió no hacerlo. Tampoco la vio ante el Inter, por lo que está disponible para el partido de ida, pero arrastra el apercibimiento.

Ampliar

Parecido ocurre con Ferland Mendy. Lo imperioso de que esté presente el francés se maximiza por las alternativas disponibles en su posición. Marcelo, uno de los laterales izquierdos más talentosos de la historia del Real Madrid, sufre muchísimo en defensa, como se volvió a evidenciar el pasado sábado, en el empate en Villarreal. Samu Chukwueze hizo suya la banda derecha del ataque del submarino con aparente facilidad. Los datos respaldan el impacto de Mendy: en los 14 partidos que se ha perdido esta temporada, el Madrid solo ha ganado ocho.

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La presencia del franco-senegalés no solo resulta fundamental en defensa, sino que el Real Madrid acusa mucho su ausencia también en la construcción de juego. Ancelotti ha revuelto las fichas en numerosas ocasiones para buscar la mejor solución para sustuirle, hasta ahora sin demasiado éxito. Además de hacerlo con Marcelo, ha probado con Nacho en el lateral izquierdo, e incluso con Alaba en el carril y Nacho en el centro de la zaga.

Sea como fuere, el Madrid ha sudado la gota gorda para conseguir fluidez en la salida de balón, como se vio ante el Villarreal este sábado, ante el Barça en las semifinales de la Supercopa de España o ante el Athletic en los cuartos de Copa.