El naval amenaza con protestas si no se cumplen las inversiones en el astillero de Ferrol
El comité de empresa de Navantia Ferrol advierte que si no se acomete la transformación física y digital de la factoría quedará comprometida su competitividad a la hora de lograr nuevos contratos internacionales
Navantia Ferrol / Sertego
Ferrol
El naval se podría volver a echar a la calle si no se cumplen las inversiones previstas para modernizar el astillero de Ferrol. El comité de empresa de Navantia Ferrol advierte que si no se acomete la transformación física y digital de la factoría quedará comprometida su competitividad a la hora de lograr nuevos contratos internacionales.
Ponen de ejemplo la falta de un nuevo dique. El astillero de Ferrol es el único de primera línea de construcción naval militar que no cuenta con esta instalación y que aún construye en grada. Esto quiere decir que los tiempos de construcción y los costes se disparan con respecto a los astilleros competidores.
La plantilla denuncia que el plan industrial contempla una serie de inversiones para resolver esos problemas estructurales que presenta la factoría, pero no se están llevando a cabo. Así que desde el comité intercentros se reclama la convocatoria de la comisión de seguimiento del plan para que la dirección explique por qué no se están acometiendo esas inversiones, cuándo tiene previsto llevarlas a cabo o, que aclare, si se harán o no.
El presidente del comité de empresa de Navantia, Emilio García Juanatey, ha puesto el acento en la necesidad de emprender la transformación física y digital del astillero, además de ampliar las instalaciones para poder trabajar de forma simultánea en varios encargos. Especialmente en el departamento de carenas. Y es que el futuro de la factoría también pasa porque este departamento pueda asumir más proyectos y no tenga que renunciar a contratos por tener sus instalaciones ocupadas con un contrato.
En cuanto a las nuevas incorporaciones, García Juanatey ha criticado que todo el proceso ha estado marcado por los continuos retrasos y ha censurado que el caso de Fene es sangrante. De las 100 plazas previstas para la factoría, solo se han incorporado una treintena de personas
La representación de los trabajadores ha advertido que si no hay avances volverán a las movilizaciones.
