Las empresas del sector de Biosalud denuncian falta de certificadores que permitan vender sus productos en Europa
Reconocen que, a pesar de todo 2021 ha sido un buen año para sus pymes, y han aumentado sus plantillas
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
¿Qué balance presenta dos años después de la pandemia el sector de la biosalud en Euskadi?
Bilbao
María Pascual de Zulueta, directora general y gerente de Basque Health Cluster, el Biocluster de Salud, asegura en Hoy por Hoy Bilbao que, estos dos años de pandemia han colocado a Euskadi en un primer plano del sector.
Situación económica
La mayoría de los 90 socios del cluster han mejorado sus cifras de resultados económicos, y han aumentado sus plantillas.
La parte negativa, asegura Zulueta es “lo difícil que resulta vender productos que están muy regulados”. Las exigencias de la Agencia Europea del Medicamento se han ido aumentando y endureciendo. La seguridad es primordial.
Clarisa Salado de Innoprot y María Pascual de Zulueta del Basque Health Cluster
Clarisa Salado de Innoprot y María Pascual de Zulueta del Basque Health Cluster
Por el contrario, han disminuido las organizaciones que otorgan los certificados, “de 125 hemos pasado a 26 certificadores, y no hay ninguno en España ni en Euskadi, impidiendo que muchos productos salgan a la luz a su tiempo”, concluye.
Tres ejemplos
Clarisa Salado es la directora-fundadora de Innoprot, una pequeña empresa que combina la experiencia en el campo de las tecnologías de descubrimiento de fármacos, con una amplia trayectoria profesional como proveedores de servicios farmacéuticos.
En el último año han aumentado su plantilla un 30%. Salado afirma que “hacemos productos reconocidos a nivel internacional, pero es muy difícil conseguir gente para los puestos que necesitamos”.
Asier Albizu, de la empresa Biolan. Se dedican a la innovación tecnológica en los campos de la seguridad alimentaria y el diagnóstico de la salud. “No hemos vendido nada en Euskadi. Nuestros test rápidos de diagnóstico se venden fuera del País Vasco, y están hechos con productos comprados aquí, de cercanía”.
Por el contrario, la parte positiva, su plantilla se ha incrementado en 40 personas.
Manuel Sánchez Lagarejo es director comercial de Bexen Medical. El Gobierno vasco apostó por ellos, asegura. Ahora son 160 empleados. Muchas de las mascarillas que consumimos salen de sus instalaciones, como los primeros congeladores de vacunas, que hicieron mantener los virales en perfectas condiciones.
