Se incrementan notablemente las familias de A Mariña que recurren al Banco de Alimentos

Lugo

Se han incrementado notablemente las familias en A Mariña de Lugo que se ven obligadas a recurrir al Banco de Alimentos, vinculándose este alto número al cierre de Vestas en Viveiro y al apagón de las cubas en la factoría de Alcoa en San Cibrao, en el concello de Cervo.

La presidenta en Lugo del Banco de Alimentos, Amadora Núñez, ha estimado que antes de desatarse esa crisis industrial acudían al banco sobre 400 familias de la costa de Lugo, y ahora se está llegando o superando “las 550”.

“Hay un montón de gente que se ha quedado sin trabajo, sin recursos y hay miedo y desasosiego, porque después de Vestas y Alcoa que le queda a la Mariña”, ha lamentado.

Núñez ha puntualizado que esa crisis “no solo afecta a la gente que trabaja” en Vestas o sobre todo en Alcoa porque “afecta a todas las empresas auxiliares de la zona”. “Hablamos de una debacle, pasamos de 400 familias en su momento a unas 550”, advertía.

Otro aspecto sobre el que ponía el foco son las familias con hijos pequeños, así ha señalado que en Lugo ciudad “son sobre seiscientas las familias” que recurren al Banco de Alimentos. Lo mismo ocurre en las sedes de A Mariña y Monforte, aunque en menor número.

Aunque la activista lucense ha destacado que ahora “están mejor”, en cuanto a la distribución de alimentos para los más pequeños sí que se quejaba de la falta de pañales que les reclaman muchas familias.

“Para los más pequeños estamos mejor, tenemos; galletitas, cacao, tenemos los productos más básicos pero no tenemos pañales y de esos ni se nos plantea nada”, ha zanjado.

Finalmente, en cuanto a reservas de alimentos Amadora Núñez se ha congratulado de que “de momento vamos mejor de lo pensado, las empresas se han volcado con nosotros y tenemos fondos de alimentos para varios meses”.