Alicante

Pleno extraordinario este miércoles en el Ayuntamiento de Alicante. El bipartito vuelve a contar con Vox, en este caso con su abstención, para sacar adelante una cuestión clave de su gestión. Si ayer daban luz verde a la ordenanza de convivencia cívica, hoy se han vuelto a unir para aprobar inicialmente los presupuestos municipales de 2022. Algo que para la oposición progresista confirma el nuevo pacto de gobierno en Alicante, formado por PP y la ultraderecha, con el silencio cómplice, dicen, de Ciudadanos.

De hecho, mientras que se han rechazado todas las propuestas de los grupos de izquierda, el portavoz de Vox, Mario Ortolá, hacía una férrea defensa de las cuentas, mayor incluso que algunos de los socios de gobierno, y sacaba pecho por los recortes conseguidos en áreas sociales y porque les hayan aceptado 19 de las 21 enmiendas presentadas.

Por su parte, la edil de Hacienda, Lidia López, asergura que se han rechazado prácticamente la totalidad de las propuestas de los grupos de izquierda porque no las presentaron correctamente. Además, defiende unas cuentas que califica como las mejores para Alicante.

Mientras desde la oposición lamentan que el PP "se haya echado en los brazos de Vox" y que haya aceptado aplicar la tijera a las áreas sociales que la ultraderecha califica de ideológicas. Un pago al partido verde, junto con la ordenanza de convivencia aprobada ayer, a cambio de que no bloqueara las cuentas de este ejercicio, critican desde la izquierda.

El edil socialista Miguel Millana, critica que en plena pandemia se priorizara eliminar la deuda municipal en lugar de destinar esos 20 millones de euros para cuestiones sociales. Decían que era para tener las manos libres para utilizarlo en lo que la ciudad necesite, pero, critica Millana, no se ha hecho nada, como se demuestra que el pasado año se dejaran sin invertir en Alicante casi 50 millones de euros.

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Por su parte, desde Unidas Podemos, su portavoz Xavi López, lamenta que los presupuestos más amplios de la historia de la ciudad hayan traído consigo los mayores recortes sociales de la historia. "Son los Presupuestos de la insolidaridad y la minoría clasista", señala.

Y por último, el líder de Compromís, Natxo Bellido, que, siguiendo la línea del socialista Millana, añade que el remanente podría ascender a 100 millones de euros por la incapacidad del bipartito para, asegura, ejecutar las inversiones. Un dinero que podría ser vital para la recuperación de la ciudad, critica.

Tras esta aprobación inicial se abre ahora un periodo de exposición pública de un mes para presentación de alegaciones. El documento definitivo se llevará a otro pleno extraordinario, previsiblemente a mitad o finales de marzo, para su aprobación definitiva.

Ofensiva en Les Corts contra "ordenanza de la vergüenza"

Por otra parte, en el Pleno de este miércoles también se ha hablado de la ordenanza de convivencia cívica aprobada ayer gracias al voto favorable de Vox. Pero no solo en Alicante, porque en Valencia, Papi Robles, la nueva síndica del grupo parlamentario de Compromís en Les Corts, se ha referido a la polémica normativa en un desayuno informativo con los medios de Alicante. Y lo ha hecho para marcar las diferencias con la ordenanza valenciana, ahora en debate, que el bipartito de Alicante, dice, "ha leído en vertical".

Para Robles el enfoque de este tipo de normativas debe ser el de generar igualdad y del punto de vista de los servicios sociales y no el del "acoso y derribo" y el de "vulnerar todos los derechos de los más vulnerables", dice.

De hecho, tanto PSPV, como Unidas Podemos y Compromís han registrado una propuesta para instar en el pleno de les Corts a que el Ayuntamiento de Alicante no apruebe esta norma.

Y en el PSPV, su portavoz Ana Domínguez, ha anunciado además que los socialistas presentarán iniciativas plenarias en todos los ayuntamientos de la Comunitat para condenar las ordenanzas, como la aprobada en el Ayuntamiento de Alicante, que pretende, dice, “criminalizar a las personas y colectivos más vulnerables”.