Aarón Cano, edil de Protección Ciudadana en València: "Las ordenanzas cívicas de Alicante y València tienen filosofías distintas, persecución frente a asistencia"

Alicante

València se desmarca de la comparación que hace el bipartito alicantino (PP y Ciudadanos) para justificar la aprobación, con el apoyo de Vox, de la nueva ordenanza cívica, conocida como contra la mendicidad y la prostitución. "Son completamente distintas y con filosofías diferentes" ha indicado el concejal de Protección Ciudadana en el consistorio valenciano Aarón Cano, quien contrapone el carácter asistencial de la de València frente al persecutorio de Alicante.

La ordenanza cívica en este municipio está pendiente aún de aprobación y sí hay una específica sobre el ejercicio de la prostitución que data de 2013 y que sacó adelante el PP con el apoyo del PSOE.

Si bien es cierto que la ordenanza que rige ahora en València contra la prostitución fija sanciones que van de los 300 a los 2.000 euros, éstas son solo para "el cliente que acuda al reclamo y a los intermediarios o proxenetas". La norma deja bien claro que "ninguna de las conductas descritas (...) están referidas a las personas en situación de prostitución, a efectos sancionadores".

Y además "se prohíbe la promoción de servicios sexuales en todos los soportes existentes públicos y privados y en medios de trasporte urbano". A pesar de todo, Cano matiza que están valorando su reforma porque "no ha servido de mucho".

Por contra, la ordenanza alicantina fija sanciones de 750 a 1.500 euros por "llevar a cabo prácticas sexuales y el ofrecimiento, solicitud o negociación (...) de servicios sexuales en la vía pública". También "el acoso callejero cargado de connotación sexual".

En cuanto a la ordenanza cívica de València, que aún es un borrador, no incluye artículos para regular la prostitución. El edil Cano niega que sea un calco de la de Alicante que fija multas de hasta 3.000 euros para quienes ejerzan "conductas bajo apariencia de mendicidad". Y destaca que en la Policía Local de València cuenta con un grupo específico de atención a personas sin hogar.

El responsable de Protección Ciudadana en València también ha destacado que en la elaboración de este borrador han contado con aportaciones de "vecinos, colectivos sociales, consumidores, hostelería y otras organizaciones" porque es vital que el ciudadano "sienta que el acuerdo es suyo".

Por su parte, para el alcalde de Alicante, Luis Barcala, el debate es estéril porque la ordenanza cívica ya está definitivamente aprobada en Pleno. Quien quiera cambiarla o derogarla deberá gobernar el municipio de Alicante, ha llegado a decir.

Considera además el primer edil que quien asegure que la ordenanza de convivencia cívica en el Término Municipal de Alicante "actúa contra la mendicidad en general, miente". Se ataca la mendicidad "coactiva, insistente, agresiva e intrusiva" y niega igualmente Luis Barcala que se actúe contra las mujeres prostituidas.