El UCAM Murcia CB se cita con la historia y reclama billete para las semifinales de la Copa del Rey
Los universitarios derrotaron a un Valencia Basket que resucitó en el tercer cuarto para complicar la vida de los murcianos (83-86)
Murcia
Partido de fundamentos del baloncesto del UCAM Murcia CB en Granada ante Valencia. El inicio fue universitario, con unos tiros iniciales que tardaron en ser efectivos de cara al marcador, pero que en cuanto comenzó a entrar la bola, no cesó el contador. Taylor fue una apisonadora intensa para contagiar a los suyos. Mientras, los taronjas solo las veían venir. Se animó el americano al triple, abriendo el campo su compatriota Webb desde el perímetro para reventar al rival.
Esto, sumado a un McFadden con la muñeca traviesa, provocó que el único en mantener a los suyos en la pomada fuera Dubljevic. Poco tuvo que hacer con Webb emparejado, infinitamente superior y crecido no solo en ataque, sino en defensa. También sumó en esta faceta Augusto Lima (14-28).
En el 2Q el protagonista fue Radovic. El jugador, silencioso en los últimos encuentros, abrió el camino para comenzar con dos triples cargados de confianza. Casi al ecuador del cuarto, Valencia no levantó cabeza y al UCAM le salió absolutamente todo. En pista, ni el efecto de Labeyrie pudo contener la sangría anotadora de los universitarios. Ahí tuvo que pedir pausa Peñarroya por segunda vez en el duelo.
Pero ni con ese parón se pudo frenar a los de Sito Alonso. Taylor continuó siendo una locomotora y no dio lugar a una reacción del rival. La incapacidad de Valencia se puso, todavía más de manifiesto con un 48% de aciertos del UCAM en triples, lo que se tradujo en un 10/21 por el 2/15 del rival (33-52).
Sin embargo, en el 3Q cambió la película por completo. El UCAM pareció quedarse en el vestuario porque en cuatro minutos vivió un auténtico infierno. Valencia, de manera inexplicable puso un parcial de 19-0 y noqueó a los murcianos para acercar posturas y empatar a 52. Lo que vino después fue la primera ventaja taronja y una caída sorprendente de los universitarios por culpa de Claver, entre otros factores, además del bajón en el estado de ánimo universitario (64-61).
En el último cuarto, el UCAM despertó pero no fue, ni de lejos, el de la primera parte. A pesar de ello, salió el gen competitivo que tanto gusta a la afición. Los murcianos empujaron y el toque de pausa lo propuso Bellas. Comandando el equipo, los de Sito Alonso recobraron el sentido del juego, pero esta vez con Valencia sin quitar el pie del acelerador. McFadden fue también un pilar del ataque, sobre todo con un final de partido ajustado de 80-79 con poco menos de dos minutos para la última bocina.
Ahí se conectó la mejor versión de Taylor otra vez, que tras una canasta tuvo que pedir el cambio tras sufrir calambres en las piernas. Esta fue la antesala de un guion de infarto con Prepelic poniendo un triple para el 83-81, dando la posesión después a Webb para devolver un triple y endosar un 83-84. Para finalizar, una defensa excelsa universitaria, dos tiros libres y un pase directo a semifinales a costa de los de Peñarroya (83-86).
Rubén González
Redactor de Radio Murcia Cadena SER con gran...