La Policía dispersa las protestas antivacunas en las inmediaciones del Parlamento de Canadá
Los agentes han detenido ya a 170 manifestantes en la capital canadiense y han sido 53 vehículos remolcados desde el inicio de la operación
Madrid
La Policía de Ottawa ha dispersado este sábado las protestas en las inmediaciones del Parlamento de Canadá tras tres semanas de ocupación por parte de los manifestantes del llamado 'Convoy de la libertad', que están en contra de las restricciones impuestas por la COVID-19.
Después de recuperar áreas alrededor del edificio del Senado de Canadá y el hotel Chateau Laurier el viernes, la Policía ha comenzado a marchar hacia el Parlamento en la mañana del sábado, despejando el National War Memorial de manifestantes y empujando a la gente fuera de la céntrica Wellington Street, según ha informado 'National Post'.
Según el último informe de la Policía de la capital canadiense, 170 personas han sido arrestadas y 53 vehículos han sido remolcados desde el inicio de la operación el viernes, según ha explicado 'La Presse'. El jefe de la Policía de Ottawa, Steve Bell, ha explicado que este sábado se han hecho "avances muy importantes", aunque la operación "no ha acabado" aún.
Bell ha explicado que los manifestantes se estaban moviendo desde el recinto parlamentario hacia los vecindarios circundantes, y que la Policía está trabajando para sacarlos "pacíficamente".
Preguntado sobre cuándo acabarán las protestas, el portavoz de la Policía de Ottawa ha explicado que "esta es una operación compleja", por lo que no se comprometen con ningún tiempo final, aunque ha instado a los manifestantes que se vayan a casa porque "la ocupación ha terminado".
Asimismo, el Gobierno de Canadá ha anunciado ayudas por un valor de 138 millones de euros (200 millones de dólares canadienses) para las empresas de Ottawa afectadas por las protestas y por las pérdidas sufridas debidos a los bloqueos y las "ocupaciones ilegales".
El Ejecutivo está aupando esfuerzos para evitar más bloqueos en el país, incluido en el cruce fronterizo de Pacific Highway en Columbia Británica y en Prescott, Ontario. "El objetivo es poner fin de manera segura a estos bloqueos y ocupaciones ilegales y restaurar el orden lo antes posible para garantizar la seguridad de los canadienses y el fin de las perturbaciones económicas", ha asegurado el Gobierno canadiense en un comunicado.