Cuenca perderá tres cuartas partes de las oficinas que tenía la extinta CCM hace un cuarto de siglo

Cuenca

Cuenca se va a quedar con la cuarta parte de las oficinas que tenía la extinta CCM hace un cuarto de siglo. Unicaja Banco, la última entidad en la que se ha integrado, cerrará doce oficinas en la provincia de Cuenca a partir del 18 de marzo, dentro de la primera fase del ERE y la reordenación que está llevando a cabo la entidad.

En toda España serán 140 oficinas las que echen el cierre, de las 400 que está previsto en el total del expediente de regulación de empleo. En Cuenca serán 32 oficinas las que dejen de prestar servicios.

El secretario de Territorios y Documentación de UGT Unicaja, Chema Gámiz, ha lamentado la progresiva pérdida de presencia y de atención al cliente que está sufriendo la entidad. Ha recordado que hace 26 años, la extinta Caja Castilla-La Mancha tenía 80 oficinas en Cuenca. A día de hoy tiene medio centenar, y cuando se termine de ejecutar el ERE, habrá perdido tres cuartas partes de su presencia en la provincia.

Aunque lamenta la pérdida de “atención personalizada” que era una de sus señas de identidad, Gámiz sí ha destacado que los sindicatos han logrado que prácticamente todas las salidas sean voluntarias. En la provincia de Cuenca serán alrededor de 40 trabajadores los que se vayan.

No ha querido avanzar, hasta que no se haga público, cuáles serán esas primeras doce sucursales que van a cerrar, aunque ha reconocido que serán en su mayoría de pequeñas localidades. Aquellas que, pese a ser rentables, ha apuntado Gámiz, no encajan en el modelo de negocio actual.

En Castilla-La Mancha esta primera fase supone el cierre de 38 oficinas, la mayoría en Toledo y Cuenca.